En Caacupé piden que jóvenes conserven memoria del pueblo

Sobre el eje “los jóvenes llamados a mantener viva la memoria de su pueblo”, el obispo de San Lorenzo, Joaquin Robledo, dirigió la homilía en el tercer día del novenario de la Virgen de Caacupé, patrona de los católicos en Paraguay.

“Estamos llamados a mantener viva la memoria de nuestro pueblo, esto significa que tenemos que conocer nuestras raíces, nuestro origen, nuestra identidad de paraguayo; eso significa conocer nuestra familia, nuestro pueblo, nuestra nación, toda nuestra historia y todo esto para no repetir hechos negativso del pasado y para poder construir una sociedad basada en la justicia, basada en la paz”, reflexionó el obispo.

Dijo que los jóvenes deben sentirse amados por el llamado del señor y responder a este con actitud de fe y de confianza. Es importante que los jóvenes entiendan que solamente unidos al señor podrán crecer bien, dijo.

“El designio de la salvación de Dios obra en la historia de los pueblos y obra también en la historia de nuestro pueblo paraguayo, también aquí entre nosotros Dios sigue dando señales de esa presencia salvadora en medio de nosotros. Esas señales concretas las encontramos en la riqueza y fertilidad de nuestro suelo, la cultura de nuestros pueblos originarios, sus conocimientos medicinales que heredamos, la riqueza de nuestra lengua, especialmente el guaraní, el aporte de la sangre y la cultura española, la difusión del evangelio a los nativos... no podemos olvidar esa original experiencia de las misiones jesuíticas”, dijo Robledo ante una mayor presencia de fieles en comparación a los dos primeros días de la novena.

Resaltó nuevamente que con esta festividad comienza un periodo de trienio (tres años), en los que la iglesia católica en Paraguay se dedicará a conocer y entender así como tratar de plantear soluciones a los problemas que aquejan a los jóvenes de nuestra sociedad. Así, cada día, las reflexiones apuntan a la juventud, a la que esperan llegar y lograr mayor adhesión.