Son 150 los niños que asisten a la escuela, del primero al noveno grado, y que dan clases en sus aulas pese al serio riesgo de un inminente derrumbe, informó Alberto Núñez, corresponsal de ABC Color.
Rafael Santacruz, director de la escuela, manifestó que la estructura presenta muchas grietas, algunas bastante profundas, y las paredes tienen desprendimientos diarios en algunos sectores, lo que hace que teman que se desplome en cualquier momento. Sostuvo que ya solicitaron al Gobierno y a la Gobernación departamental que construyan dos aulas de forma urgente para que los chicos sigan con su formación sin riesgos, pero no tienen respuestas.
En ese sentido, mencionó que el gobernador Alfonso Noria (ANR) se comprometió en 2015 a construir una nueva escuela tras los reclamos, pero hasta ahora no ven avance alguno. También presentaron pedidos por escrito al Ministerio de Educación, que no obtuvieron respuesta alguna.
Debido al riesgo que existe, se organizará una reunión con los padres para adoptar medidas que inminentemente apuntan a abandonar la deteriorada escuela, que fue construida hace solo 15 años. El edificio ni siquiera fue terminado correctamente, pues se aprecian acabados desprolijos y algunas aulas carecen de ventanas y pizarrones en condiciones. Pese a ello, fue habilitado.
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