En contacto con ABC Cardinal, el fiscal Marcelo Pecci señaló que la Cámara de Apelaciones terminó de resolver todos los inconvenientes que surgieron sobre el proceso a los hermanos Carlos Rubén, Ardonio y Denilso Sánchez Garcete, por lo que espera que en una o dos semanas se pueda determinar si irán o no a juicio oral.
Los hermanos Sánchez Garcete están procesados por lavado de dinero, asociación criminal y delitos previstos en ley de tráfico de drogas. Sobre el último hecho punible dijo que hubo aprovechamiento pecuniario relacionado al tráfico de estupefacientes.
Mencionó además que estas personas deberían de haber estado hoy con prisión preventiva pero por cuestiones que tienen que ver con el juzgado hoy tienen libertad ambulatoria. Justamente unos días atrás salió a la luz un video en el que se ve a una familia brasileña dentro de un vehículo, rodeados de otros automóviles y “capangas” o guardaespaldas armados apuntándolos, todos al mando de Carlos Rubén.