Los ahora imputados habían agredido física y verbalmente a un niño de 13 años en el baño de la institución. Se encuentra a cargo de la investigación la Unidad Penal Número 3, a cargo del fiscal Edgar Villaverde.
El hecho ocurrió el 31 de mayo pasado, alrededor de las 09:30, y tomó estado público a través de las redes sociales. Un vídeo muestra cómo cinco jovencitos rodean a su víctima en el baño, y lo agreden física y verbalmente. Luego, le obligan a admitir ciertas declaraciones. El problema de fondo sería un mensaje que el niño habría hecho llegar a la novia de su agresor, también estudiante del colegio.
El tutor del niño agredido, un tío materno cuyo nombre no fue dado a conocer, presentó una denuncia ante la Fiscalía por las agresiones de que fue víctima su sobrino. El adolescente recibió golpes de puño, entre otros, por parte de uno de sus agresores.
El fiscal Villaverde sostuvo que los ahora imputados tienen 15 años, y son penalmente responsables. La fiscalía abrió una investigación contra el presunto agresor, así como contra los instigadores y cómplices de la agresión. El hecho configura un caso de coacción grave, que tiene expectativa de pena carcelaria de hasta cinco años, explicó el agente fiscal. Entretanto, pidió medidas precautorias, como la prohibición a los agresores de acercarse a su víctima.
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En el transcurso de esta semana los cinco menores de edad, quienes estarían cursando el segundo año del Nivel Medio, serán llamados a declarar ante el Juzgado de la Niñez y la Adolescencia, atendiendo a que el Código de la Niñez prevé que los menores de edad deben presentar declaración indagatoria ante dicha instancia, y no ante la fiscalía.
La directora general del CIC, Lic. Graciela Prieto, lamentó los hechos, y dijo estar preocupada por la derivación que tiene el caso en el ámbito judicial. “Nosotros como institución ya tomamos las medidas administrativas correspondientes, que para casos graves es la suspensión de la matrícula para el principal responsable de los hechos”, señaló.
No obstante, la encargada de despacho de la institución dijo que como educadores, los responsables de la institución creen en la persona humana, y que esta situación será superada. “Un niño de 15 años puede equivocarse, llevado por el impulso, dijo. Agregó que pensó que el tema de hecho había sido superado, y que estaba en desconocimiento de la intervención fiscal, e incluso de que se haya llegado al punto de abrirse un proceso penal en contra de los estudiantes”.
