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En los allanamientos que se realizaron ayer, la comitiva fiscal policial llegó hasta la empresa “Canto Rodado”, ubicada sobre las calles Antonio González Riobóo 640 esquina Chaco Boreal. La agente fiscal Nathalia Silva, en compañía de funcionarios de la institución y efectivos policiales, encontraron la vivienda totalmente vacía.
Sin embrago, la defensa técnica del exfiscal Javier Díaz Verón y su esposa María Selva Morínigo había asegurado que la empresa en cuestión aportaba al patrimonio de la pareja grandes ingresos económicos.
Para la Fiscalía, la empresa era de fachada, pues no contaba con la infraestructura edilicia ni con los recursos humanos para ser considerada una fuente económica.
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El segundo sitio intervenido ayer fue un local denominado Yeruti Comunicaciones, situado sobre la calle 29 de Setiembre esquina 12 de Octubre. La agente fiscal Clara Ruiz Díaz, en compañía de una comitiva fiscal-policial, llegó hasta el lugar y, tras la verificación correspondiente, no hallaron ningún mueble, es decir, aparentemente se encontraba desocupada. Vecinos desde hace varios años manifestaron desconocer la existencia de la empresa en la zona.
El tercer procedimiento se realizó en una empresa denominada Lagunita, situada sobre la avenida Choferes del Chaco 278 esquina Juana de Lara. En la oportunidad, la agente fiscal Silvana Otazú y un equipo de trabajo hallaron un lote de documentos, consistentes en seis biblioratos. Los objetos incautados fueron puestos en resguardo para su posterior análisis de rigor.
Javier Díaz Verón y María Selva Morínigo fueron imputados conforme a la investigación realizada por un equipo de trabajo que identificó montos considerables que no coinciden con los ingresos legales declarados y los gastos presentados por el exfiscal general del Estado.