Julián López Cristaldo, uno de los contratistas de la estancia Alegría S.A., fue el primero en ser sometido a la verificación forense, cuyo resultado reveló que llevaba muerto al menos 24 horas, determinado por el estado de descomposición que presentaba.
La víctima recibió cuatro impactos de bala; uno en la parte posterior de la cabeza, otro en la nuca, una en el glúteo izquierdo – todas estas con orificio de salida – y la última en la mano izquierda, cuyo proyectil calibre 9 milímetros quedó incrustado.
Tras darse a conocer el resultado de la autopsia, se determinó que el cuerpo sea entregado a sus familiares.
Restan conocer los resultados de las pericias hechas a los cuerpos de Edison Ramón Aguilar Román (contratista) y Eladio Pavón Acosta (capataz), las otras dos víctimas del nuevo atentado adjudicado al EPP.
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Los cadáveres fueron encontrados en la siesta de hoy, cuando un funcionario llegó al sitio y se encontró con la macabra escena, para luego dar aviso a las autoridades.