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La camioneta “omnipresente” era una de las modalidades a las que recurrían funcionarios para robar combustible, según el informe final de la auditoría realizada, comunicó Aguayo. Otro hecho llamativo, entre varios otros, fue que a un mismo vehículo se le cambiaron las cubiertas unas 14 veces.
Así también prometió que a partir de ahora reforzarán los controles del suministro de combustible, insecticidas y otros insumos. “Hay muchas deficiencias constatadas con la intervención. Ahora ningún vehículo sale sin orden y marca del kilometraje”, explicó. Se reactivarán los controles con GPS, que supuestamente están funcionando.
Otra medida pero relacionada a los insecticidas será que cada vez que se vacía un bidón, lo deben llevar al Senepa. “Tendremos un informe técnico de lo que se hizo y un informe administrativo; una planificación muy importante es lo que se va a hacer en lo técnico”, manifestó en entrevista con la 780 AM. Con respecto a la tarea que ahora le toca asumir, dijo que la eliminación de criaderos de mosquito es la principal tarea de la institución a su cargo, para evitar que se desarrollen el dengue y la chikunguña.
“Vamos a hacer correcciones muy profundas, sobre todo en el área administrativa. Se sufrirán importantes cambios. A medida que estos controles se refuercen, no volverá a repetirse (esta situación)”, manifestó. Recordó que se contabilizó más de G. 1.070 millones en combustibles, pero que nunca pudo ser probado de cómo fue utilizado.