Monseñor Ricardo Valenzuela, obispo de Villarrica, firmó el comunicado en donde rescata la importancia del respeto de las leyes e instituciones para un orden social justo, evitando toda arbitrariedad y totalitarismo. "Ruego al Señor que nos regale más políticos a quienes les duela de verdad la sociedad, el pueblo, la vida de los pobres", reza parte del comunicado.
En otra parte insta a buscar y construir la paz social y aclara que la Iglesia está abierta a la colaboración con todas las autoridades para cuidar este bien universal. Finalmente pide a todos los sacerdotes del departamento del Guairá a que en todas sus celebraciones eucarísticas realizadas en las parroquias de la Diócesis se rece por la paz social del departamento.
La crisis política se originó el pasado viernes 3 de marzo cuando ediles departamentales dieron entrada a una dudosa carta de renuncia del gobernador Rodolfo Friedmann, quien se encontraba fuera del país. Inmediatamente los concejales eligieron a Óscar Chávez como gobernador del IV departamento.
Friedmann desde el exterior negó su supuesta renuncia y tildó el hecho como un golpe de Estado, pidió un recurso de amparo y el juez Bienvenido González lo repuso en su cargo. Sin embargo, el juez César Alfonso lo destituyó y ordenó que Rodolfo Pereira, presidente de la Junta Departamental sea gobernador interino.
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Esta mañana se tuvo un ambiente de mucha tensión en la sede gubermanental pues dos grupos antagónicos estaban instalados en las inmediaciones. El ambiente se calmó luego del fallo del Tribunal Electoral que dejó sin efecto la supuesta renuncia de Rodolfo Friedmann y la asunción de Rodolfo Pereira.