/arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/QOTFN2OEKJFGBG2EDH7TY3NO6Y.jpg)
Cargando...
Jesús Yegros es docente y vive en el kilómetro 44,5 de la ruta II, una zona marcada por la tragedia de los accidentes. Cuenta que hace cinco años, autoridades religiosas y educativas de Pedrozo se unieron y presentaron propuestas para terminar o al menos reducir los sucesos en ese tramo.
En su proyecto incluyeron el legajo de 50 accidentes de tránsito registrados en cinco años, entre el kilómetro 48 y el 44. Fue presentado al Ministro de Obras Públicas, por entonces Enrique Salyn Burzaquis, a quien le pareció interesante el manojo de soluciones propuestas, pero las trabas las encontraron en la Patrulla Caminera.
Entre las ideas figura la instalación de una caseta de control de la Patrulla Caminera en el kilómetro 48 de la ruta II, jurisdicción de Caacupé, donde el conductor del camión que causó el fatal accidente esta semana se detuvo por problemas de frenos. “Si hoy había caseta, ese chofer se iba a quedar a dormir hasta que llegue su mecánico, para no pagar la multa”, dijo.
También habló de equipar dicho puesto con radares inteligentes que controlen la velocidad, pues prácticamente todos los accidentes de tránsito ocurren a causa de la excesiva rapidez con que descienden por la pendiente.
La preocupación sigue latente, pues en las inmediaciones del kilómetro 45 existe una institución educativa a la que asisten numerosos estudiantes. Sin respuestas a los reclamos, los accidentes podrían seguir causando víctimas que lamentar, expresó el docente.