La protesta se inició en la tarde de este jueves. Un grupo importante de miembros de la Asociación de Importadores del Mercado de Abasto se apostó en el acceso principal al Abasto y lo bloqueó, como forma de manifestación en contra de la cancelación de la Acreditación Fitosanitaria de Importación (AFIDI). Esta cancelación les impide seguir importando tomates desde Argentina y Brasil.
Según explicó a nuestro medio Aldo Villarreal, presidente de la Asociación de Importadores, la necesidad de importar el fruto no proviene de ellos, sino de los mismos consumidores, que exigen un tomate de calidad, y “el nacional está muy lejos de satisfacer las expectativas del consumidor”, señaló.
El importador explicó que el cierre del mercado de Abasto será indefinido y, en un primer momento, planean acampar en el lugar toda la noche, “al menos hasta que alguna autoridad del Ministerio de Agricultura o del Senave (Servicio Nacional de Calidad y Sanidad Vegetal y de Semillas) venga a decirnos algo o a intentar mediar para una solución”, expresó Villarreal, en contacto con ABC Color.
El importador explicó que las trabas no vienen precisamente del Senave ni del MAG, sino de la Cámara de Frutihortícolas, que son los que buscan impedir el ingreso de productos importados a nuestro país, pues alegan que les genera pérdida en el comercio de los productos nacionales.
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Aldo Villarreal recalcó que la intención no es generar pérdidas a los productores nacionales, sino simplemente cubrir una necesidad que tienen los consumidores. “La gente quiere tomates lindos, no quiere tomates que vienen lindos en la parte de arriba y abajo todos en mal estado, y los compradores pagan de todas formas con tal de tener calidad. El producto se necesita”, manifestó.
Finalizó expresando que no buscan un permiso ilimitado, “sino solo meter uno o dos camiones a la semana, dependiendo de la necesidad del comprador”.
