Un joven denunció que llamó a pedir ayuda a efectivos de la Policía luego de detectar que un ladrón había ingresado a su domicilio. Lo que no esperaba es que los agentes se alcen con una caja de joyas valuadas en alrededor de G. 2.000.000 y de dos celulares, tras la inspección. ¿Qué opinaron los lectores?
La ciudadana Adelina Penayo opinó que “el 80% de la Policía no tiene educación ni moral”. Mientras que Ramón Libanés comentó que “la inmoralidad de muchos agentes es impresionante, seguramente dirán: 'Si los de arriba roban, ¿por qué no lo haríamos nosotros?'".
Margarita Sánchez expresó: “¡¿Qué vamos a extrañarnos?! Si el gobierno corrupto ya no tiene control sobre sus propios policías... ¿A quién hay que recurrir? Falta que la población haga justicia por manos propias”.
El lector Arturo Dávalos expresó, indignado: “Nosotros le pagamos el sueldo a estos ladrones, le compramos combustible y uniforme para que nos roben”. A su vez, la lectora Laura Espínola compartió que “el ministro del Interior debería moverse urgentemente para mejorar la imagen de la Policía Nacional que está bastante deteriorada y sin credibilidad, a través de sumarios y expulsión de los mismos”.
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Pedro Cabral recomendó que “se le apliquen los sumarios correspondientes a los intervinientes. Si hay alguna falla en su procedimiento deben ser sancionados así de simple”. Finalmente, Carolina Benítez lamentó que “después pidan respeto y confianza... Si esto sigue así, iremos de mal en peor”.
Finlamente se separó de sus cargos a los cuatro policías de la Comisaría 7ª Metropolitana denunciados por supuestamente haber robado dos teléfonos celulares de una persona que había pedido auxilio ante la presencia de un ladrón.