Indignante trato en Senadis

Selva Fernández tiene 65 años de edad y desde hace 30 se dedica a tiempo completo a ser madre. Su hijo nació con una discapacidad motriz severa, por lo que sus peripecias se tornaron aún más dramáticas.

Lo que nunca pudo imaginar esta mujer es que por un trámite burocrático, como obtener un certificado que le permita obtener beneficios para su hijo, tendría que pasar un verdadero suplicio en la Secretaría Nacional por los Derechos de las Personas con Discapacidad (Senadis).

En contacto con radio ABC Cardinal, Selva comenta que el padre de su hijo se jubiló y debieron tramitar un documento para obtener una ayuda adicional. Sin embargo, grande fue su sorpresa cuando se encontró con la falta de sensibilidad de los funcionarios, ya que -según relató- ni siquiera accedieron a ayudarla con el traslado de su hijo hasta las oficinas, por lo que debió hacerse cargo y llevarlo en brazos, con ayuda de una amiga.

Parte del drama que debió soportar quedó documentado en imágenes y videos que se viralizaron esta mañana. En las mismas se observa cómo la mujer -con gran esfuerzo- debe transportar a su hijo para cumplir con un papeleo exigido. “Es muy triste... Si pudiera la gente ver lo que pasé; dos días pasé eso. Es extremadamente doloroso y todo por un papel nomás”, lamentó.

La madre mencionó que en reiteradas oportunidades solicitó una camilla a la Senadis para facilitar a la familia el traslado; sin embargo, solo recibió negativas a su pedido de ayuda. “Yo viví un cuadro doloroso; solamente escuché: 'No, no, no y no'. No te imaginás lo que es estar con tu hijo a cuestas...”, expresó.

Mencionó que los funcionarios contaban con una camilla disponible pero ni siquiera se inmutaron, ya que -siempre según el relato- se encontraban desayunando a esa hora, siendo casi las 09:00. “Claro que tienen camilla, si es el área de enfermería... Me cansa esta triste realidad; mi hijo tiene 80% de discapacidad, él no habla siquiera, por lo que ni para silla de ruedas es”, manifestó.

Su desazón fue aun mayor cuando -al creer dar con una solución al encontrarse con el ministro de Senadis, Diego Samaniego- solo recibió burlas de respuesta. “Le encontré afuera al ministro y ahí le conté que Dani (su hijo) tenía que tener ese papel y ahí me dijo que qué tiene que ver... Ni me permitió explicarle más. Le dije que había gente desayunando y se burlaron de mí; dijeron: '¿No le invitaste el desayuno?'. Se burlaron así”, detalló.

Selva aclaró que no tiene cuestionamientos en cuanto a la asistencia con medicamentos y otros implementos, pero lamentó la falta de tacto de ciertos funcionarios. “Ahí tienen remedio, no te cobran nada, pero quiero que eso positivo se potencie. No solo soy yo, hay muchos otros con discapacidad severa; defiendo a muerte a Senadis pero tiene su lado bueno y su lado malo”, manifestó.

Pidió que se disponga ajustes para mejorar la atención a las personas con discapacidad desde la misma Senadis. “Yo por lo menos tengo la oportunidad de hablar pero hay otros que no tienen oportunidad de hablar”, manifestó al insistir en que muchas otras personas estarán pasando por suplicios similares al acudir a la secretaría de Estado.