Compatriota y sus hijas murieron aplastadas en Argentina

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Una mujer paraguaya de 28 años y dos de sus hijas pequeñas, de 3 años y 9 meses, perdieron la vida al ser aplastadas por un árbol, durante una fuerte tormenta que asoló a la localidad de Pilar, provincia de Buenos Aires.

La paraguaya, identificada como Elena Aguirre (28) vivía con su esposo y sus cuatro hijas, en el barrio La Lonja de la ciudad de Pilar, provincia de Buenos Aires, Argentina.

En la tarde del martes, la mujer y los niños se encontraban celebrando un cumpleaños infantil en una vivienda contigua a la humilde casita en la que habitan. En un momento dado, comienza a desatarse una fuerte tormenta, por lo que la mujer decide volver a su casa a cerrar las ventanas para que no se mojaran las camas de las niñas.

La más grande de las hijas quedó en el lugar del cumpleaños, mientras Elena volvió con las tres más chicas, de 6 años, 3 años y 9 meses.

Fue cuando se encontraban en la precaria casa, rodeada de frondosos árboles, que uno de los grandes troncos se desmoronó contra la vivienda, aplastando a la mujer y a las dos bebés, identificadas como Zoe (9 meses) y Guliana (3 años) que quedaron atrapadas dentro de la pieza.

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La niña de 6 años logró escapar y esconderse en un baño de la casa, logrando ser rescatada posteriormente por los vecinos, que escucharon su llanto.

Momentos después del doloroso suceso, el padre de las niñas y pareja de Elena, identificado como Desiderio, aunque los medios argentinos no mencionaron el apellido, llegó a la zona, encontrándose con el fatal hecho. En medio de la desesperación, caminó varias cuadras para tratar de encontrar una ambulancia, debido a que los móviles no podían ingresar a la zona inundada debido a la tormenta.

El hecho se registró alrededor de las 18:30 del martes, y enlutó a todo un barrio que conocía a la familia y ahora se solidariza con el padre, que quedó solo con las dos niñas sobrevivientes. El hombre, quien trabaja como albañil en la capital Federal, solicitó ayuda ante la situación de desamparo en la que se encuentra.

Además de este hecho, todo el barrio de La Lonja y unos 25.000 usuarios de la localidad de Pilar quedaron sin los servicios de luz y agua, con postes de luz caídos y árboles derribados.