Las personas afectadas dijeron que fueron sorprendidas por las aguas, luego de las precipitaciones que se registraron entre la noche de ayer y madrugada de hoy.
Los barrios más afectados fueron San Miguel, Maria Auxiliadora y Don Bosco, completando un total de 30 casas afectadas por este desastre natural.
En la mayoría de estas viviendas, las aguas ingresaron y alcanzaron una altura de unos 50 centímetros, afectando sobre todo a equipos de electrodomésticos, camas y roperos.
Los afectados coincidieron en señalar que esta situación se viene regustrando desde hace años, cada vez que se producen lluvias de gran intensidad como ésta, a consecuencia de la falta de sistemas de desagüe.
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En solo cinco días, en esta capital departamental ya llovió alrededor de 300 mm, el equivalente a los meses de enero y febrero.
El cielo permanece totalmente cubierto con posibilidades de que se produzcan más precipitaciones.