Ignacio Urbieta Cantero, de profesión contador, fue detenido en la vía pública el día lunes en la capital del Alto Paraná, en el marco de las investigación de la megaevasión impositiva que involucra a más de 250 empresas que están en la mira por la presunta adulteración de facturas, a fin de pagar menos impuestos.
Según el subcomisario José Velázquez, del Departamento contra Delitos Económicos de la Policía, detalló que Urbieta sería uno de los cerebros del esquema de evasión. El mismo ya venía siendo investigado desde inicios de marzo, pero no se podía ingresar a su vivienda en el Paraná Country Club sin orden judicial.
Mediante un trabajo de inteligencia se produjo la detención en las inmediaciones de su oficina en la zona céntrica de Ciudad del Este, sin que este oponga resistencia, “salvo sus abogados, que quisieron incidentar el procedimiento”, señaló el jefe policial en contacto con ABC Cardinal.
Además de Urbieta fueron detenidas otras tres personas semanas atrás, en plena mudanza de oficina, por lo que se presume que tendrían la intención de ocultar documentos de interés para los investigadores. Según las presunciones del Ministerio Público, 13 proveedores que serían “fantasmas” otorgaron facturas truchas por montos millonarios a 285 contribuyentes. Estas firmas utilizaron las facturas que rondan los US$ 270.000.000.
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