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Víctor Álvarez, de la Dirección de Meteorología, aclaró que aún no se concluyó si el fenómeno del martes fue un torbellino o un tornado.
“Necesitamos recabar más datos. En cuanto a la intensidad del viento, podría tratarse de un tornado de menor intensidad”,explicó a ABC Color.
Confirmó que -de acuerdo a los últimos informes- la velocidad de los ventarrones alcanzó los 140 kilómetros por hora.
Esta característica no es concluyente, ya que se deben analizar otros elementos como la trayectoria que tuvo el viento, según señaló.
“El tornado tiene un camino de destrucción bien definido”, detalló al indicar las diferencias a ser cotejadas para hablar de uno u otro fenómeno.
Indicó además que generalmente un torbellino dura alrededor de cinco minutos, mientras que los ventarrones de la víspera se mantuvieron por unos 10 minutos.
La Dirección de Meteorología tendría una conclusión definitiva sobre el tema entre la tarde de este miércoles y el jueves, según adelantó Álvarez.
Según datos de la Dirección Nacional de Aeronáutica Civil (Dinac), los vientos se originaron desde la zona ribereña del río Paraguay, en el este, y se extendieron hacia el centro de la ciudad de Mariano Roque Alonso, la ciudad con más destrozos.
El fenómeno destruyó unas 5.000 viviendas en los departamentos Central, Ñeembucú, Caazapá e Itapúa.
Varias áreas quedaron sin energía eléctrica ni agua potable, debido a los destrozos generados.
Hasta el momento, se confirmó la muerte de tres cadetes y una menor de 16 años de edad, debido a derrumbes en Mariano Roque Alonso. Una quinta víctima se encuentra con muerte cerebral.
Meteorología mantiene vigente una alerta meteorológica para la zona norte del país.