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El índice de morosidad en bancos llegó al 3,06% a mayo de este año, su posición más alta en la última década, mientras que en financieras el nivel de morosidad en la cartera de préstamos fue del 6,46%, también la más alta de los últimos años.
Al respecto, Heisecke sostuvo que la morosidad va en línea con la situación económica actual. “Es coyuntural y no es motivo de preocupación o alarma por el momento”, afirmó, agregando que el sistema se caracteriza por contar con entidades muy sólidas y fuertes con suficiente liquidez y que las condiciones podrían mejorar en la segunda parte del año.
Por otro lado, con el bajón económico, el sector financiero se vio afectado con una reducción del 9% en sus utilidades. De todas formas, entre enero y mayo de este año, los bancos acumularon ganancias por US$ 155 millones.
Sobre esto, técnicos del Banco Central del Paraguay (BCP) explican que la desaceleración económica que afectó a varias actividades en el 2015 tiene impacto tardío en nuestro sistema financiero y por ello sus efectos se sienten con más fuerza recién en este 2016.y seguirá en el próximo año.
Al respecto hay que saber que el Producto Interno Bruto (PIB) del país creció apenas 1,5% en el primer trimestre del año, gracias a la agricultura y las binacionales. La incidencia de estos dos sectores resulta tan importante que si no fuera por ellos, el PIB hubiera tenido una caída del 0,6%, pues bajaron los rendimientos de industrias (-3,6%), ganadería (-0,8%), servicios (-0,4%) y los impuestos (-0,6%).