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El uniformado, en una nota brindada a la radio 800 AM, confirmó que la Policía nunca pudo hacer su trabajo en la zona, ya que si se detenía a un sospechoso con drogas, al día siguiente ocurrían dos cosas: Primeramente, la liberación del capturado; después, el traslado del agente que realizó el procedimiento.
“Anteriormente no se podía hacer nada, ya que había protección política para los delincuentes. Se encubría a todos. Por ejemplo, el camión que fue requisado en la Municipalidad de Ypehú estaba preparado con un doble fondo para transportar drogas”, recordó el comisario Barúa, haciendo alusión a que dentro de la propia comuna el intendente ocultaba un rodado que era usado para llevar y traer drogas, pero nadie podía ir a verificar eso, puesto que Vilmar Acosta es un poderoso referente de la política.
Sobre las denuncias de hechos como este, el comisario explicó que no se podían radicar, dado que uno estaría expuesto a cambios o a que las acusaciones terminen en la nada. Sin embargo, apuntó que ahora la situación cambió y se dio luz verde para poder detener y llevar ante la justicia a todos los que operan al margen de la ley.