Luego de ser rescatadas anoche, desabrigadas, solas y pasando hambre, las niñas de entre 6 meses y cuatro años fueron resguardadas en casa de unos vecinos que se ofrecieron a brindarles albergue, en el barrio Santo Domingo, de la ciudad de Capiatá, a la altura del kilómetro 20 de la ruta II “Mariscal Estigarribia”. Así lo informó el fiscal al frente del caso, Hugo Pérez, de la Unidad Penal Nº 2, de Capiatá.
El agente refirió que personal de la Codeni, la Defensoría de la Niñez y el Juzgado de la Niñez están trabajando para encontrar un albergue y la forma de ayudar tanto a las niñas como a la madre, a tener alimentos y calidad de vida.
El fiscal informó que en principio no notó el hecho punible de abandono ni violencia, así como tampoco de violación al deber del cuidado. Señaló que la madre está en situación de extrema pobreza, pero tampoco se puede criminalizar la pobreza, pues ella manifestó que no desea separarse de sus hijas, y pide ayuda. “Ella prestó declaración indagatoria y también apareció el padre de las niñas, un serigrafista, que manifestó que sí aporta dinero para la alimentación de las niñas, pero no les alcanza para vivir”, manifestó el fiscal.
Ahora el Juzgado de la Niñez deberá determinar qué proceder corresponde en base al interés superior de los niños.
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Al cuestionársele al fiscal por qué motivos no se presume abandono, teniendo en cuenta el hecho de que las niñas estaban desabrigadas y pasando hambre, el agente manifestó que son niños pequeños, que mientras la madre salió a buscar alimentos pudieron haberse sacado los abrigos en un descuido.
“Ella no muestra intención de despojarse de sus hijos, al contrario, quiere cuidarlos. No podemos imputarla, porque vamos a causar un daño mayor. Está amamantando a la más pequeña, y separaríamos a las niñas de su mamá. Ahora lo que necesitamos es el elemento de contención que debe proveer el Estado, de manera a que ellos puedan sobrevivir cada día”, afirmó el fiscal.
Las cinco niñas fueron encontradas anoche, luego de que unos amigos, que compartía un asado, escucharon llantos en las cercanías. Cuando se acercaron a la acera de enfrente, encontraron a dos hermanitas, de cuatro y dos años, semidesnudas y solas. Uno de los hombres, Ramón Elías, quien es funcionario municipal, les preguntó dónde estaban sus padres y la más grande lo guió hasta una casa cercana.
Una vez en el lugar encontraron a otras tres niñas, unas gemelas de 1 año y medio y otra de seis meses. La madre no estaba, y se dio aviso a la policía, que se constituyó en el lugar junto con la Fiscalía. Una hora después llegó la madre, quien manifestó que había salido a buscar alimentos.