“La gente tenía la esperanza de recuperar algo, pero no quedó absolutamente nada”, dijo Castillo a ABC Cardinal. Agregó que la lluvia se inició el 7 de diciembre y en 28 horas la comunidad registró 400 milímetros de agua caída.
Esta se fue acumulando al costado de la ruta, hasta que la hizo colapsar y el torrente se dirigió violentamente hacia la escuela y la destruyó por completo. “Ni un pedazo de ladrillo quedó”, afirma. El predio de la institución es de 15 m x 18 m y en lugar del edificio solo quedaron zanjas y lagunas.
Mencionó que la gente de la comunidad está totalmente aislada. La Supervisión local ya está al tanto y tramita una comunicación para la Supervisión departamental. Son 27 alumnos, que estudian en plurigrados del primero al sexto grado, los que se quedaron sin escuela.
Recordó que la institución fue construida gracias a ganaderos de la colonia, es decir, levantada sin ayuda alguna del Ministerio de Educación. La escuela no tiene título de propiedad porque estaba en un terreno donado por uno de los propietarios de la colonia; por ello, el MEC nada puede hacer.
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La escuela más cercana se encuentra a 11 kilómetros de distancia, por lo que hablar de un traslado es imposible. “Hay que recuperar esa escuela, pero en ese lugar será imposible construirlo”, lamentó.