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La celebración religiosa presidida por el obispo, Monseñor Ricardo Valenzuela, se inició a las 19:00 de este lunes en la catedral de la ciudad de Villarrica, departamento de Guairá. Estuvieron participando de la misma el gobernador departamental Rodolfo Friedmann Alfaro y el diputado nacional Pedro David Britos.
Igualmente estuvieron presentes intendentes colorados y liberales, así como funcionarios de la Gobernación y adherentes de Friedmann, quien llegó hasta el templo 30 minutos después de que haya iniciado la misa.
Durante su homilía el Monseñor Valenzuela Ríos se dirigió principalmente a las autoridades del Guairá y a la ciudadanía pidiéndoles que busquen la paz por sobre todo.
En un momento citó a San Agustín manifestando que “la paz clásica es la tranquilidad del orden; donde hay orden, todas las cosas están dispuestas con un fin. Las personas ocupan su lugar y hacen lo que deben”, haciendo clara referencia a lo que ocurre en la gobernación guaireña.
Dijo también “si hay desorden surge la intranquilidad, la desavenencia y también la guerra”, por eso “cada estamento de la sociedad debe estar en paz y para conseguirlo se trabaja; se suda para llegar a la paz, que es lo que nos está tocando ahora”
Solicitó en otro instante reflexionar sobre lo que ocurre, porque es algo verdaderamente importante y “ojalá fuésemos todos instrumentos de paz, donde existe tanta intolerancia y codicia”, para poder llegar al orden necesario.
Posterior a la celebración religiosa, se llevó a cabo una marcha pacífica con velas encendidas y en la que se hizo un recorrido por los alrededores de Plaza Libertad, luego pasó frente a la sede de la Gobernación del Guairá.