La anterior arrendataria de Acepar, la brasileña Vetorial, se fue del país en enero de este año, dejando millonarios “clavos” en Paraguay. Según los datos del sector, quedó debiéndoles unos US$ 5 millones a distribuidores de varillas, es decir, a los clientes de la acería que compraron productos por adelantado y no recibieron las mercaderías; a los proveedores de carbón otros US$ 2,7 millones (en ese grupo está la empresa Loable), que también tenían materiales entregados de forma anticipada; a la Ande, unos US$ 1,5 millones; a la misma Acepar, US$ 6,5 millones por cuotas de arrendamiento impagas; entre otros acreedores.
En este escenario, Loable SA, de Nicolás Peña, había promovido en febrero pasado el embargo judicial de insumos que estaban en el patio de la acería, de tal forma a resguardar su patrimonio empresarial. Peña consiguió embargar unas 1.000 toneladas de carbón, otras 1.000 Ton. de piedra caliza, 1.600 Ton. de palanquilla, 3.000 Ton. de carbón a granel, 3.000 Ton. de mineral de hierro y numerosos materiales más.
Pero hoy, grande fue la sorpresa del empresario al corroborar que todos esos insumos que tenían prohibición de utilizarse, ya no están en la planta industrial. Peña consiguió una orden judicial para secuestrar los materiales embargados, firmada por la jueza de Primera Instancia en lo Civil y Comercial del Quinto Turno de Asunción, Julia Rosa Alonso Martínez. Al llegar a la fábrica, se encontraron con un predio prácticamente vacío, según se ve en un video grabado por el afectado y enviado a nuestro diario.
Otra dificultad con la que se toparon esta mañana, según lo informado por Peña, es que el abogado de Acepar, Pedro Martínez, no permitió el ingreso de los camiones de Loable, pese a la orden judicial.
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Nuestro diario conversó con el administrador de la acería, Ing. José Luis Vinader, y éste alegó que no le notificaron sobre el procedimiento, aunque él no ordenó ningún impedimento. “Ni enterado estoy. Ni avisaron que iban a hacer eso”, dijo, en comunicación telefónica. “Que lleven lo que corresponde. Cada uno defiende sus intereses”, añadió.
Al ser preguntado por qué se usaron materiales que tenían embargos, señaló que, en realidad, los insumos no podían ser embargados porque estaban “en warrant” por parte de Vetorial (es un producto financiero, similar a una prenda o garantía); estaban en garantía por el dinero que le dieron los bancos en su momento a la firma brasileña, por lo que, tras la salida de Vetorial, los materiales fueron llevados por los bancos, dijo Vinader.
Sin embargo, Peña señaló que cuando se desarrolló el juicio que terminó con el embargo, nadie se presentó a defender supuestos derechos. Por ese motivo, presentará un escrito por "quebrantamiento de orden judicial" contra los que impidieron el secuestro de los materiales.
Por otro lado, el administrador de Acepar también fue consultado por una denuncia de robo que hubo recientemente. “Lógico que hay ladrones. Ahí entran y roban. Tenemos vigilancia pero aún así somos vulnerables. Pero esos son rateros”, respondió, haciendo referencia a que son sustracciones pequeñas.
Finalmente, dijo que están coordinando con la empresa china HCME la reactivación de Acepar, a través de un nuevo arrendamiento. “Estamos trabajando con los chinos para que traigan los materiales, las maquinarias. La idea de ellos es arrancar en dos o tres meses”, indicó.