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Durante una declaración en el Departamento de Investigación de Delitos, el padrastro brindó breves declaraciones a ABC Color, ocasión en que negó todas las acusaciones, pese a que estaba huyendo de la Policía desde hace dos semanas.
Aseguró que no sería capaz de violar a una persona y embarazarla y puso como prueba el hecho de que ya estuvo con varias mujeres y nunca lo acusaron de esta manera y ni siquiera las embarazó. “Con cuántas mujeres ya estuve y nunca las embaracé. Yo no puedo...”, expresó.
Consideró que todo partió de una discusión que tuvo con su expareja, madre de la niña. “Peleé con mi novia... Ella es pleitera”, manifestó al ser abordado sobre los motivos.
Respecto a las declaraciones de la víctima, quien confirmó que fue abusada por él, aseguró que ella pudo ser presionada por la mujer. “La niña puede decir eso por temor”, manifestó.
El hombre desafió a que les practiquen los análisis a él y a la niña para probar su supuesta inocencia. “Deben hacerse los análisis, no puede ser que me acusen”, expresó.
En otro momento, al ser abordado ya por varios medios en conjunto, Gilberto Benítez insistió en que su expareja lo denunció sin tener pruebas y molesta con él. “Para qué ella hizo eso sin saber; se pueden hacer los estudios y yo digo que va a salir negativo”, aseveró.
Respecto a la forma en que la niña pudo terminar embarazada si supuestamente quedaba a su cuidado, el hombre señaló que él quedaba solo en la casa. “Vivíamos en Limpio y cada día iban a Luque, donde se quedaban un día. Luego venían ya de noche. Yo quedaba solo en la casa”, sostuvo.
En otro momento, el presunto violador fue más tajante y aseguró que “yo no le toqué a ella”. “Yo me quedaba solo nomás en la casa”, insistió.
Respecto al motivo por el cual se encontraba fugado de la justicia, el hombre no supo explicar su actitud. Reconoció que sabía que la Policía lo estaba buscando por abuso sexual en niños y aseguró que “yo iba a venir para que me agarren acá”.
Indicó que permanecía en el departamento de Caazapá, debido a que en el lugar se encuentra la residencia de su hermano. “Yo no estaba en el bosque, sino que estaba trabajando”, manifestó.
Gilberto Benítez Zárate fue detenido a las 03:30 de este sábado, en la compañía Boquerón, de Caazapá, luego de permanecer prófugo desde el 23 de abril pasado, cuando la Fiscalía tomó conocimiento del caso de una niña de 10 años violada y actualmente con cinco meses de gestación.
La menor consultó en un sanatorio privado de Luque por el crecimiento de su vientre. Luego se le practicaron estudios en el Hospital Materno Infantil de Trinidad, donde se confirmó que estaba a mitad de un embarazo.
La menor habría sido sometida sexualmente en más de una ocasión, considerando que ya en enero de 2014 el padrastro fue denunciado por abusar de ella. El caso quedó en la nada debido a que la propia madre aseguró que se trató de un malentendido.
La madre de la víctima igualmente fue detenida e imputada, ante su actitud aparentemente cómplice, según las evaluaciones de la Fiscalía. Ya posteriormente, la mujer atinó a señalar que “yo no sabía nada”.