Paraguayo ayuda al Papa y le regala chipa

Ricardo Villalba, paraguayo de misión en Roma, ayudó al papa Francisco a inscribirse a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ). El joven relató su emoción, le regaló una chipa y otros obsequios. El Papa lo abrazó, bendijo y envió saludos a Paraguay.

https://arc-anglerfish-arc2-prod-abccolor.s3.amazonaws.com/public/COLUXX5DWZAAVKHP2AIK2IN7AU.jpg

Cargando...

A falta de solo tres días de retornar al Paraguay, luego de un año de misión en Roma, Ricardo Villalba ayer tuvo la oportunidad de conocer al papa Francisco, orar con él, ayudarlo a inscribirse vía web a la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) y recibir su bendición.

Villalba comentó emocionado cómo fue el paso a paso desde que atravesó la Puerta de Santa Ana, llegó al Palacio Apostólico y sorpresivamente ingresó el Papa como 20 minutos antes del inicio del Ángelus.

Él tuvo que mostrarle al Santo Padre cómo utilizar el iPad para inscribirse públicamente a la JMJ, que se llevará a cabo en enero del año que viene en Panamá; Ricardo y una joven de otro país estuvieron durante la ceremonia detrás de Francisco. Con este acto, se abrió oficialmente la inscripción para la actividad juvenil.

Ricardo manifestó que en todo momento le temblaron las manos y no dejaba de mirar al Papa porque estaba sorprendido de tener la posibilidad de conocerlo, finalmente, ya que llevaba un año de misión en Roma y, sin éxito, hasta ayer, había buscado la oportunidad en varias ocasiones.

Confesó que subir a la tarima al lado del Papa para el Ángelus significó una sensación sin precedentes, y una vez terminada la ceremonia, fue el último en entregarle el regalo que llevó para él. “Le digo: Santo Padre, aquí le traigo un pequeño regalo”; y él agarra la bolsa y, como un nene, empieza a mirar, y me dice: ‘¿Qué es esto? ¿Qué es esto?’. Entonces le digo: ‘Esta es la chipa paraguaya que me dio una chica que está acá, en Roma’, y él me dice: ‘¡Uhh, esta chipa es buena!’”, relató.

Señaló, además, que pudo explicarle de qué se trataba su movimiento Misión Roma, y solicitarle su bendición. “Le dije: Santo Padre, quiero que sepa que nosotros rezamos por usted”, añadió.

Recordó con mucha emoción que Francisco le puso las manos en la cabeza para bendecirlo, lo abrazó, le pasó la mano y envió saludos a Paraguay, además de desearle un feliz retorno. “Es increíble la sencillez del Papa; es una persona que te transmite mucho Dios, te transmite mucha tranquilidad, te transmite paz con su presencia. Sobre todo, estar ahí con él en ese lugar fue una cosa muy fuerte, como que te tocaba el corazón”, puntualizó.

Enlance copiado
Content ...
Cargando...Cargando ...