Patota lo interceptó y golpeó

Un joven de 19 años fue víctima de una violenta golpiza la madrugada del domingo por parte de un grupo y resultó con varios cortes en la cabeza a causa de la agresión. El hecho ocurrió en el barrio Itá Enramada de Asunción.

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El estudiante Jorge Alejandro Sánchez Viveros, de 19 años, denunció en la Comisaría 13ª Metropolitana, del barrio Itá Enramada de Asunción, que él y otros jóvenes fueron atacados de manera brutal por parte de un grupo de al menos cinco personas, luego de salir de un evento social cerca de las 4:00 del domingo.

Tres de los supuestos autores fueron identificados plenamente como José Bernal, Rodrigo Rodríguez y Brian Thompson, de acuerdo a la denuncia radicada ante la Policía Nacional por los afectados. Todo comenzó cuando un amigo de Sánchez, de 17 años, proveniente de Bélgica y que no habla castellano, halló una billetera de mujer en la vereda y mientras la revisaba para ver si había algún documento adentro para identificar a la dueña, un sujeto se acercó hasta él y lo empujó.

Luego, Sánchez Viveros, según su declaración en la dependencia, se acercó para mediar y explicar que nada había en la billetera, ínterin en que vino otro sujeto, le empujó y sin mediar palabra le dio un puñetazo en la boca, rompiéndole un diente; además de tumbarle al suelo, le estiró del brazo y le robó un reloj marca Tissot. Por su parte, su novia y una amiga suya también fueron agredidas por los otros inadaptados, denunció. Posteriormente, los sujetos subieron a dos automóviles y huyeron de la escena. Uno de los vehículos tiene la placa YAB 115 y sería Nissan Sunny.

Las víctimas de la brutal agresión física fueron para ser atendidas en el Hospital San Roque de Asunción. El joven Sánchez Viveros recibió curaciones del doctor Arturo Pérez, según refiere el acta labrada en la comisaría.

El ministro del Interior, Francisco de Vargas, informó este lunes que se estudia la posibilidad de instalar cámaras de filmación en las patrulleras policiales, para así realizar un control del actuar de los uniformados. El anuncio lo hizo tras las protestas ciudadanas por el último caso de “gatillo fácil”, que dejó parapléjico a un joven.

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