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Arnaldo Giuzzio explicó en conversación con radio ABC Cardinal que los proyectos presentados ayer hacen referencia a modificaciones en el Código Electoral. Uno de ellos refiere a la posibilidad que las personas privadas de libertad sin condena puedan ejercer su derecho al sufragio.
El artículo 153 de la Constitución Nacional establece que los únicos que pierden la ciudadanía son precisamente aquellos con condena. “Eso nos da la pauta que, de las 13.000 personas más o menos que están hoy en los centros de reclusión, solo 3.000 tienen condena y 10.000 no; es decir, 10.000 no están votando”.
Expuso que esta idea no es nueva, ya que organizaciones internacionales como la OEA y la ONU habían recomendado en las últimas elecciones generales de 2013 que se dé posibilidad a que los presos sin condena puedan votar.
El proyecto establece que cualquier persona privada de libertad pueda votar dentro de la prisión en que se encuentra y que se compute su voto en el lugar donde le corresponde, es decir donde está inscripta, en caso de que haya sido trasladada a otro centro de reclusión.