Denuncia fiscal contra Jiménez Gaona

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El Ing. Hermann Pankow presentó esta mañana una denuncia fiscal contra el ministro de Obras Públicas, Ramón Jiménez Gaona, por lesión de confianza y asociación criminal. En su presentación calcula un perjuicio contra el Estado de US$ 3.000.000.

Pankow, uno de los responsables del diseño original del superviaducto "Rodrigo Quintana", es patrocinado por la abogada Yolanda Paredes. Ese diseño original posteriormente fue modificado por la empresa contratista Isolux-Corsan, con la anuencia del MOPC.

La denuncia, que tiene 65 páginas, también incluye a los siguientes miembros del Comité Evaluador del súperviaducto: Dionisio Agustín Mereles Verón, Roberto Carlos Enrique Caballero, Esteban Vicente Sarubbi Lutz y al viceministro de Obras Públicas, Juan Manuel Cano Fleitas. También involucra a la directora de Proyectos Estratégicos (DIPE), Claudia Centurión.

Pankow presenta como hechos, entre otras cosas, que el MOPC violó la Ley 2.051, de contrataciones públicas, al haber llamado a licitación internacional, siendo que la obra fue financiada por fondos locales y no requiere de tecnología especial (Art. 18º).

Dice que la misma ley restringe adjudicar o, incluso, dejar participar en licitaciones a empresas con problemas financieros o extranjeros que pertenezcan a países que no dan el mismo trato a empresas paraguayas.

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Señala que la Fiscalía de Delitos Económicos debe investigar por qué se eliminó a cinco empresas constructoras de seis que concursaban en esa licitación llevada a cabo en julio de 2015.  Argumenta que se debió declarar desierta la licitación, ya que no se pudo comparar precios y así detectar la oferta más alta.

Se pregunta para qué se pide que coticen si lo que importa es la evaluación técnica subjetiva de funcionarios designados a dedo. En ese sentido, pide investigar a quienes firmaron esas "eliminaciones técnicas" a las cinco empresas.

Además, si hubo vínculos de españoles que realizaron esos informes que favorecieron justamente a la empresa ibérica adjudicada, ya que en la DIPE se hizo esa evaluación técnica, y allí es sabido que cuentan con ingenieros españoles. "Eliminar técnicamente a empresas que cotizan mejor es algo habitual en las licitaciones", destaca.

El escrito señala asimismo que hace años "está armado" un esquema que permite que sea sumamente fácil direccionar licitaciones en el MOPC; la situación denunciada ha ocurrido por esa razón, pero seguirá ocurriendo si no hay una corrección.

Solicita también pesquisar las oficinas de otras empresas extranjeras, llamadas de portafolio, que vienen a ganar licitaciones pero no cuentan con los elementos suficientes para construir, ni están afianzadas en nuestro país, como el caso de la firma portuguesa Mota Engil, adjudicada para el metrobús.