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En Trinidad, sobre la Ruta VI "Dr. Juan León Mallorquín", la protesta de los automovilistas que se dirigían hacia Encarnación, en hora pico, no se hizo esperar. El otro peaje está en Coronel Bogado, sobre la ruta I "Mariscal López", donde también hubo una gran cantidad de automovilistas esperando pasar.
"Tanta propaganda para un servicio deficiente", exclamó Antonio Melnenchuk, quien se trasladaba hacia la capital itapuense con productos de granja. El encargado del puesto de peaje, Raúl Olmedo, afirmó que la larga cola es porque aún no se cuenta con la cantidad necesaria de funcionarios para atender los cuatro carriles existentes.
Otra demanda es por los carteles con tarifas desactualizadas. Pese a regir la reducción en un 50%, los indicadores a ambos carriles de la ruta indican el pago de G. 10.000 en el caso de los autos. "Es un error de la empresa que construyó el peaje y vamos a corregir", anunció Olmedo. En la práctica, los usuarios terminarán pagando lo mismo que hasta ayer: los vehículos livianos abonarán G. 5.000 de peaje y los pesados de G. 10.000 a G. 20.000 (camiones con tres ejes, G. 15.000, y más de tres ejes, G. 20.000).
Consultados los automovilistas sobre el precio, la mayoría opina que en breve subirá. "El Gobierno no quiso subir el precio por temor a cortes de ruta", dijo Antolín Paniagua, pero acotó que la intención sería aumentar el peaje en corto plazo. En los puestos de peaje de Emboscada, Ypacaraí y Puente Remanso también se vio una larga fila de vehículos en este primer día de la aplicación del cobro bidireccional.
El encargado del puesto de peaje en Remanso, Gustavo Román, indicó que la excesiva demora en el cobro del peaje es porque esta mañana desde las 06:00 el sistema tecnológico experimentó fallas y recién será restablecido cerca de las 11:00, según informó el periodista Juan Jara. Explicó que en este local hay cinco cajas y hoy funcionan cuatro. Aclaró, además, que faltan recursos humanos para cubrir los tres turnos del servicio vial.