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“Lo único la ajeruréa es ojejapohaguã justicia. Ojekuaa haguã la che rajy, mávapa la agueraha chupe ha máva rupive la ha'e oguahê upépe (Lo único que pido es que se haga justicia. Que se muestre quién le llevó ahí a mi hija y por medio de quién llegó hasta ahí)”, manifestó esta mañana Francisco Meza, padre de la joven de 18 años que fue asesinada por Marcelo Pinheiro el sábado pasado en la Agrupación Especializada.
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Comentó que una tal “Soledad”, que trabajaba con su hija, fue quien le informó sobre lo sucedido, antes de que lleguen los agentes policiales de la Comisaría de San Antonio.
Agregó que junto con toda su familia vivieron en Argentina varios años, en busca de oportunidades laborales y un futuro mejor. Lidia es su hijo menor y llegó del vecino país este año; trabajaba como vendedora en el Mercado 4 hasta que hace un par de meses la contrataron para cuidar a una mujer de 90 años, por lo que solo visitaba a su familia los sábados.
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El padre contó que el sábado, día en que fue asesinada, a las 12:17 le mandó un audio a través de WhatsApp para comentarle que a las 15:00 ya estaría con ellos en casa. “Era muy cariñosa. Todos lloran por ella ahora, tenía una gran amabilidad”, agregó en otro momento el padre, bastante dolido por lo sucedido.
“Ajerure justicia, ndoikatúi la che rajy oike upeape. Oimantearã upea la ojapóa (Pido justicia, no podía mi hija entrar en eso, alguien tuvo que haber hecho eso)”, aseguró don Francisco. Comentó también que el sueño de su hija era estudiar Derecho y por ello quería realizar un curso rápido para terminar los años que del bachillerato que debía completar y luego iniciar la universidad.
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