Los nativos habrían sido captados para fabricar carbón vegetal en el establecimiento agropecuario Ruroka S.A., en el departamento de Boquerón, y tratados de forma “infrahumana”, según la Fiscalía.
El allanamiento del establecimiento estuvo liderado por Teresa Martínez, de la Fiscalía Especializada contra la Trata de Personas, quien estuvo acompañada de personal del Departamento Antitrata de la Policía Nacional.
Martínez ofreció este lunes una rueda de prensa en Asunción en la que señaló que los indígenas fueron convencidos de trabajar en la fábrica debido a la falta de actividad en el cultivo del sésamo.
La fiscal añadió que los nativos denunciaron que los propietarios de la estancia incumplían los pagos salariales correspondientes. Los indígenas aché conforman uno de los veinte pueblos originarios de Paraguay, un país donde la población que se reconoce como nativa no llega al 2 % del total.
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