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“De lo contrario, no hubiera sabido cómo es el manejo interno del supermercado”, declaró la fiscala Dora Noll, a cargo de la investigación del llamativo robo en que un desconocido hurtó G. 830 millones ingresando y saliendo del centro comercial sin que nadie se percate.
Dora Noll recordó que el ladrón entró por una puerta de metal destinada al ingreso del personal, vestido con una campera roja, parte del uniforme de la empresa. En ese acceso no existe ningún guardia de seguridad, solo una persona que recibe los bolsos de los funcionarios. “Ingresa sin control estricto porque justo la persona giró como para agarrar un bolso, obvió el control y pasó caminando”, declaró la fiscala en contacto telefónico con ABC Cardinal.
Posteriormente, según la agente fiscal, el hombre ingresó a un pasillo y golpeó la puerta de Tesorería. “Una vez que abrieron la puerta, empujó, ingresó y se encerró con ambos funcionarios. Se apoderó del dinero en cuatro minutos y salió sin que nadie se haya percatado del hecho”, recordó Dora Noll. La fiscala agrega que una vez que tomó la calle, otra persona lo estaba esperando en una moto, a bordo de la cual ambos se fugaron.
En cuanto al dispositivo de seguridad en el supermercado, la agente del Ministerio Público informó que en la parte posterior de la puerta por donde ingresó el malviviente no hay ninguna cámara. Apuntó que en el pasillo por donde ingresó sí hay un circuito en el cual se visualiza que la persona ingresa y pasa, “pero el rostro es muy difícil de identificar”, agregó Noll. Una tercera cámara se ubica en la puerta de tesorería, de donde el hombre extrajo el dinero; sin embargo, curiosamente, esta no funcionaba desde el viernes.