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Un total de 10.836 toneladas de sésamo de producción nacional ingresaron sin observaciones al mercado japonés durante los meses de marzo a diciembre de este año, informó el Senave.
La exportación se realizó en colaboración con la Cámara Paraguaya de Exportadores de Sésamo (Capexse) y la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (Jica), al igual que con productores y acopiadores del rubro.
El proyecto de fortalecimiento y consolidación de la producción y uso de semillas mejoradas de sésamo para los pequeños productores del Paraguay, que apunta a optimizar la calidad del sésamo paraguayo, también colaboró en este proceso. El sésamo paraguayo es muy apreciado en los mercados internacionales, dijo el Senave.
Paraguay exportó hasta el 19 de diciembre 28.562 toneladas de la semilla, siendo Japón el mayor importador de la oleaginosa, seguido de México con 4.492 toneladas y Turquía con 3.127 toneladas, completando la lista otros 23 países de todo el mundo que adquirieron el sésamo de producción nacional.
Un total de 49 lotes fueron rechazados para la exportación por superar índices de presencia de plaguicidas en estas semillas, apuntó Senave. En ese sentido, el Ing. Agr. Luis López, jefe del Departamento de Muestreo Laboratorial Especializado, de la Dirección de Laboratorios, informó que los principios activos detectados en las partidas descartadas para Japón fueron Carbaryl, Fipronil e Imidacloprid y la combinación de éstos en otros lotes.
“El ingreso de sésamo sin impedimentos al Japón representa un importante avance en lo que refiere al mejoramiento de técnicas de muestreo aplicadas por la institución desde este año, actividad que se vio fortalecida con la adquisición de modernos equipos de laboratorio, además de las periódicas capacitaciones técnicas a funcionarios y productores”, concluyó el informe de Senave.
El exministro de Agricultura y Ganadería Alfredo Molinas, actual asesor agroambiental de la mesa agrícola de la Unión de Gremios de la Producción (UGP), dijo días pasados que “es una lástima que se haya producido la reducción abrupta del área de siembra del sésamo, que según versiones apenas habría cubierto 10.000 hectáreas a nivel país, un sexto de las 60.000 hectáreas que se cultivó el año pasado”.
“Gracias a un saldo de stock del año pasado pudimos alcanzar otra vez las 27.000 toneladas de exportación este año, que es muy similar a la del 2015. Entonces, el desafío que vemos para el año que viene es que se vuelva a sembrar la cantidad de hectáreas que normalmente se hace en sésamo”, remarcó Molinas.