El presidente de la Conferencia Episcopal Paraguaya, y arzobispo de Asunción, Mons. Edmundo Valenzuela, fue abordado por nuestro diario al término de la misa "cena del Señor", en la Catedral Metropolitana este Jueves Santo.
Sobre el momento político que vive el país, el arzobispo llamó a una profunda reflexión para el cumplimiento de la Constitución Nacional y las leyes en el país. “Si todos cumplimos las leyes en el país, funcionará bien la nación. Pero las leyes parecen estar hechas para no ser cumplidas, o al menos solo la cumplen los tontos o los pobres”, fue la respuesta de Valenzuela para graficar el país que tenemos en este momento.
“La liberación de la que se habla en el evangelio de la fecha tiene que ver mucho con la liberación del pecado ¿Qué es el pecado? Es aquello que nos destruye como personas, como familia y como país, y ya vemos el no funcionamiento de la Justicia, el no funcionamiento del orden constitucional, y el no cumplimiento de muchos artículos de la Constitución Nacional. Nosotros (por la Iglesia católica) somos ciudadanos como cualquiera, amamos la patria, amamos el país, y sin duda que como jerarquía no nos metemos en la arena de los partidos políticos, pero sí opinamos sobre el bien común, que es propio de la Iglesia”, enfatizó.
“Otro aspecto que pedimos es que la gente reflexione, que el pueblo analice si los candidatos (para las próximas elecciones generales) qué piensan con relación al bien común, con relación a la familia, con relación a los Tratados de Itaipú y Yacyretá, y cual es la opinión que tienen sobre la libertad de conciencia y la libertad religiosa”, agregó el arzobispo entre otros temas de mucha actualidad en la realidad social y económica de nuestro país.
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Instó a todos los paraguayos a la participación activa de las próximas elecciones, que se realizarán el 22 de abril y ratificó la postura de los obispos emitidas recientemente a través de “una carta de los obispos” dirigida tanto a las autoridades que serán electas como a la población en general. A través de la misma, se exhorta a los partidos políticos y a los candidatos a respetar la Constitución y acatar el marco jurídico para garantizar el Estado de derecho.
También el documento insta a la defensa de la familia, la promoción de la reforma agraria, el acceso a la tierra y al desarrollo del sector campesino, así como el combate a la corrupción en las instituciones públicas e impulsar la reforma del sistema judicial y penitenciario para garantizar la seguridad de los ciudadanos.