Suman voces contra el casino

El Gobierno de Horacio Cartes y el clan Zacarías, encabezada por la intendenta Sandra McLeod de Zacarías, su marido Javier Zacarías y su cuñado Justo Zacarías, desde 2014 vienen proyectando la concesión por 20 años del predio de 11 hectáreas de la Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP). La idea es contruir en el sitio un hotel casino y, pese a que se anunció la realización de una licitación internacional, desde el año 2014 el empresario Simon Falic anuncia que él realizará inversiones en el terreno indicado, con una provilegiada ubicación.

El plan es rechazado por la organización Estudiantes en Defensa del Patrimonio (Edelpa) y sindicalistas de las Administración Nacional de Navegación y Puertos (ANNP). Ahora se suman Cámara Paraguaya de Construcción (CAPACO)-Regional Alto Paraná y representantes de profesionales arquitectos del Universidad Catolica, filial Alto Paraná, y Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad Privada del Este (UPE). La razón es que el predio en cuestión alberga elementos históricos, es el sitio donde se fundó Ciudad del Este, por lo que es considerado un patrimonio urbanístico.

En el comunicado señalan que el sitio de la fundación, tiene un carácter histórico no solo para la capital de Alto Paraná, sino para nuestro país.. Como representantes de la sociedad civil organizada hacen hincapié en la necesidad de fortalecer la memoria de la ciudad.

“La memoria se construye con la identificación y el reconocimiento de los sitios que han marcado la historia y con el uso colectivo de los mismos. De ahí la importancia de la permanencia de los sitios históricos. Sin ellos no existiría sociedad comprometida, y tampoco progreso colectivo en armonía. Hoy, la zona costera adolece de un vinculo con la ciudad, por el uso anárquico y sin planificación alguna, en beneficio de muy pocos y en desmedro de la toda la ciudadanía´´, expresa en parte el comunicado.

Los profesionales explicaron que el predio de la ANNP, debe entenderse como un espacio público, con valor histórico y cultural, y como parte integrante del borde costero. Por esta razón instamos a las autoridades a detener cualquier intervención en esta área hasta tener un proyecto participativo, consensuado, que contemple y defina una visión integral del borde costero y de su vínculo con la ciudad.

Igualmente, advierten que una inversión de carácter público o privado en la cabecera del puente, implicará un considerable aumento de las fricciones espaciales de por sí ya al límite en el momento actual. ´´La inversión que debería significar beneficios en el desarrollo del sector, probablemente terminara acarreando más problemas que soluciones“, indican considerando que ya el comercio fronterizo de la ciudad se desarrolla en un espacio muy limitado.

Aclaran que están a favor de a favor de las inversiones a la ciudad pero consideran que esas inversiones deben responder a un plan de desarrollo económico y social de la región para que beneficie a la mayor cantidad de habitantes del área metropolitana de Ciudad del Este.

El comunicado también rechaza cualquier intervención en el sitio de la ANNP sin una planificación de todo el borde costero, su relación con el micro centro, y como parte integrante de la ciudad y al uso de los espacios públicos, para fines particulares en detrimento de la ciudadanía y de la toda la población.

En tanto, apoyan la inversión privada, comprometida con el desarrollo sostenible, que construya ciudad y garantice su futuro, la planificación urbana, con participación ciudadana, que defina una ciudad que sea generadora de riqueza, social y económicamente mucho más equitativa y la preservación del patrimonio histórico y cultural.

Desde hace varios meses los universitarios agrupados en una organización denominada Estudiantes por la Defensa del Patrimonio realizan manifestaciones en contra de la destrucción del predio. Piden que se conserve la totalidad del terreno porque lo consideran patrimonio urbanístico, por el espíritu histórico que posee.

Edificio de la Aduana que fue construido en los años 50, es considerado una joya de la arquitectura moderna. se trata del primer edificio del Alto Paraná construido de hormigón armado, por ende es el primer edificio de Ciudad del Este. La dirección de obras y construcción de este edificio estuvo a cargo de una empresa Danesa, con asiento en Argentina, Ctristiani &Nilsen Cia.