Arropada por trajes coloridos, con una estética que cuida cada detalle y una cálida sonrisa en los labios, Jennifer se roba la atención del público durante sus shows con “Purahéi Soul”, un grupo conformado por esta artista y el cantante Miguel Narváez (25). El dúo presenta temas de jazz, guarania, soul, pop y polcas en su último disco “Swing Guaraní”.
La sutileza de Jennifer y la personalidad energética de Miguel se complementan a la perfección en escena, donde ambos artistas juegan a generar diversas emociones en el público. “Es un momento mágico y romántico, ya que los temas que tocamos durante la presentación invitan a sentir distintas cosas, algunas tristes y otras alegres”, comenta la intérprete.
Esta agrupación musical tiene grandes influencias del folclore nacional, pues la vocalista argumenta que ella y Miguel buscan reinterpretar la rica cultura del suelo guaraní. “Nosotros estamos orgullosos de ser paraguayos, me siento una galopera de estos tiempos”, añade la vocalista.
Con esta reivindicación de la cultura popular paraguaya, Miguel y Jennifer pretenden resaltar lo positivo que tiene el folclore nacional. “Estas hermosas tradiciones que nos representan son para guardarlas; sin embargo, hay otros aspectos negativos de nuestras costumbres que debemos cambiar como el tan arraigado machismo”, explica la intérprete.
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La “galopera del siglo XXI” comenta que, para sus presentaciones, desarrolló un personaje que está inspirado en su mamá, a quien considera un gran ejemplo. “En el escenario juego a ser una diosa y con este alter ego trato de representar a todas las mujeres fuertes que me rodean”, afirmó Jennifer.
Este año, Purahéi Soul tiene el objetivo de realizar dos giras al exterior del país y un tour por los escenarios del interior de nuestra tierra. “Nosotros creemos que hacen falta más mujeres en la industria de la música y, por eso, para estos shows, armamos una bandita koygua conformada exclusivamente por chicas”, cuenta la vocalista.
La artista manifiesta que, dentro del país, todavía son muy pequeños los espacios para las agrupaciones conformadas por mujeres, pero la intérprete considera que, en los últimos tiempos, los músicos empezaron a tomar conciencia de esta situación. “Estoy muy orgullosa de mis colegas artistas, pues me parece que el rol actual de las chicas en el mundo de la música es absolutamente protagónico”, añade Jennifer.
Para concluir, la galopera de la era digital invita a todos los jóvenes a manifestar lo que sienten, a través de sus talentos, pues esta libertad de comunicar lo que pensamos es un derecho y el arte es algo hermoso que nos ayuda a sanar heridas.
Por Agustina Vallena (19 años)