De pobre a multimillonario: ¿hay un secreto o es simple magia?

Existen muchas personas multimillonarias por herencia: los jeques, reyes y sultanes nacieron ricos al poseer los bienes del Estado. Pero también están los que nacieron pobres y ganaron fortunas con su trabajo, constancia, pasión, visión y determinación.

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Hace poco, la revista Forbes lanzó un ranking que ubicaba a las personas más ricas del mundo, con la aclaración de que el patrimonio de cada uno fuera propio, no obtenido por herencia o por el status de ser jefe de Estado. La riqueza se traduce en años de esfuerzo y dedicación. Conozcamos mejor las historias de vida de los que tuvieron que crear su fortuna desde cero.

El hombre más rico del mundo actualmente, Jeff Bezos, nació en el año 1964, en Alburquerque, Estados Unidos. Sus padres lo tuvieron extremadamente jóvenes, su madre solo tenía 16 años y su padre 18, a causa de la inmadurez de la pareja y el alcoholismo, se separaron. Creció en un barrio humilde y con problemas familiares, pero esto no calmó su sed de conocimiento.

En su juventud, Bezos fue aceptado con anticipación en la Universidad de Princeton, donde estudió ingeniería electrónica y comunicación; una vez recibido, se trasladó a Nueva York para buscar trabajo. Luego de tocar varias puertas buscando una oportunidad, fue contratado por una empresa llamada D.E Shaw & Co, de la cual, a sus 26 años, ya fue vicepresidente.

El norteamericano era una persona muy curiosa, un día de 1994, mientras leía un informe, descubrió que el uso de internet había aumentado un 2.300%; entonces pensó que debía aprovechar ese campo. Jeff ideó un plan de negocios, pensando en 20 productos que una persona común compraría con frecuencia; una vez recolectada toda la información, instaló su primera oficina en el garaje de su casa.

En 1995, con el apoyo de su familia y pareja, lanza a la web “amazon.com”, cuyo nombre fue elegido porque “suena majestuoso”, según Jeff.

Luego de tan solo unos meses en internet, Amazon recibe una grandísima inversión del grupo KPCB: nada más y nada menos que ocho millones de dólares. No había pasado ni un año de su invención y, la página de Bezos, ya vendía en 45 países y generaba US$ 20.000  semanales.

La empresa continuó creciendo, sobrepasando todas las expectativas y hoy, gracias a su emprendimiento, Jeff Bezos es el hombre más rico del mundo. Cálculos apuntan a que percibe más de US$ 216.000 por minuto. Lo más destacable que describe y siempre caracterizó a Jeff es su incansable instinto de superación y su obsesión por el éxito. Su patrimonio actual es de US$ 124.700 millones.

La segunda persona más rica del mundo según la revista Forbes, Bill Gates, nació el 28 de octubre de 1955, en Washington, Estados Unidos. Desde muy pequeño contó con una brillantez que asombraba a propios y extraños. Llegó a su juventud y, siendo alumno de la Universidad Harvard, creó la empresa de software Microsoft. El emprendimiento de Gates recibió numerosas criticas en sus inicios, a causa de sus tácticas comerciales.

Bill continuó su camino, escalando hacia el éxito sin dar mucha importancia a las opiniones ajenas. Apple se interesó mucho por sus proyectos y llegó a una alianza con Gates; juntos, sacaron al mercado el producto Macintosh.

Actualmente, Bill continúa como presidente de Microsoft, es copresidente de la Fundación Bill y Melinda Gates y también es director de la Berkshire Hathaway y CEO de Cascade Investment. Su patrimonio es de US$ 93.500 millones.

Ocupa el tercer lugar entre los más ricos del mundo Warren Buffet, quien nació el 30 de agosto de 1930, en Nebraska, Estados Unidos. A los seis años, vendía chicles, recorriendo cada casa de su localidad.

En su juventud, gracias a su inteligencia e ingenio, fue aceptado en la universidad y estudió economía. Ya recibido, comenzó a trabajar en un sistema de inversión. En 1965, compró una compañía que sufría problemas financieros; su sencillez y honradez hicieron que su camino hacia la prosperidad avanzara a pasos agigantados. Tan solo unos años luego del inicio de su aventura en el mundo de la inversión ya pudo adquirir acciones en empresas importantes como los supermercados Tesco o el local de comidas Kraft.

Warren es, por una gran distancia, el inversionista más exitoso de la historia; logró una mejora en el rendimiento de la marca Coca-Cola del 800% en 12 años, solo por poner un ejemplo.

En lo político se ha declarado abiertamente demócrata y, varias veces, se ha pronunciado a favor del aumento de impuestos para los más ricos. Buffet realizó la mayor donación de la historia, al desembolsar US$ 30.000 millones para la fundación Bil y Melinda Gates. El patrimonio actual de Buffet es de  US$ 84.000 millones.

Bernard Arnault nació el 5 de marzo de 1949 en Roubaix, Francia. En 1971, empezó a trabajar en la empresa familiar y convenció a su padre que venda las actividades de construcción y obras públicas de la empresa por 40 millones de francos y así cambiar el enfoque de la compañía hacia la promoción inmobiliaria.

Bernard fue nombrado director de desarrollo de la compañía en 1974. Siguió escalando y, menos de una década más tarde, Arnault invirtió 90 millones de francos y adquirió la empresa Financière Agache como presidente ejecutivo. De esa forma, asumió el control del grupo Boussac. En 1987 realizó una inversión en el grupo LVMW y, tan solo tres años después, fue elegido el presidente de la compañía, de manera unánime.

Pasó el tiempo, su fortuna siguió creciendo, hasta que en 2005, se convirtió en el hombre más rico de Francia. Hoy es el cuarto hombre más rico del mundo y cuenta con un patrimonio de US$ 68.400 millones.

Aparece un latinoamericano. Carlos Slim nació en Ciudad de México, un 28 de enero de 1940, es un empresario e ingeniero mexicano y ocupa el quinto lugar entre las personas más ricas del mundo, el primero de la lista de habla hispana.

Recibió el título de ingeniero civil en la Universidad Autónoma de México; a muy corta edad, comenzó a invertir en la compra de pequeños negocios de venta de fruta, ropa y demás productos; no importaba en que tienda invertía, través de su creatividad, Slim la hacía prosperar.

Paso a paso, consiguió formarse un nombre en México, sus bienes iban creciendo y hasta pudo formar su propio grupo de trabajo, el cual lo ayudaba a prosperar más rápidamente. Años después, realizó una inversión en Apple, adquiriendo acciones, así su fortuna se multiplicó considerablemente.

En 2008, compró un 6,4 % del periódico estadounidense The New York Times, es decir 9,1 millones de acciones, por un valor aproximado de US$ 123 millones.  Actualmente es también el principal accionista de la telefónica “Claro”. Sus bienes siguieron aumentando y hoy su patrimonio es de US$ 57.900 millones.

Con estos cinco ejemplos, podemos notar que la riqueza no siempre te va a caer del cielo, en realidad, solo unos pocos tienen ese privilegio; hay que esforzarse al máximo, ser inteligentes, emprendedores y estar decididos a llegar a la meta, sin que importen las opiniones de los demás, siendo indiferente a lo que puedan llegar a pensar las personas que son carcomidas por la envidia.

Todos los que lideran la lista de la revista Forbes tienen en común que nunca recibieron regalos de nadie, ninguno de ellos nació en una cuna de oro y mucho menos heredó una fortuna de sus progenitores. Cada uno de los cinco líderes del ranking tuvo que abrirse su propio camino, todos recurrieron a su visión e inteligencia para emprender proyectos, considerados hasta adelantados a su tiempo.

Desde Jeff Bezos hasta Carlos Silm, todos y cada uno de los hombres más ricos del mundo tuvieron críticos y detractores. Si vos inicias un emprendimiento pequeño y recibís palos desde un comienzo, no te desanimes, nadie puede asegurar que no seas el próximo Bill Gates.

Por Diego Benítez (19 años)

 

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