“Desde pequeño me gustó el ámbito de la electricidad; recuerdo que me regalaban autos a control que apenas me duraban una semana, pues los desarmaba y de los motores hacía ventiladorcitos, conectando con una pila”, comenta Claudio. El emprendedor manifiesta que siguió el bachillerato técnico en electricidad y, actualmente, asiste al cursillo para ingresar a la Faculta Politécnica de la UNA.
“Un día, una vecina me solicitó que le cambiase el zócalo de un fluorescente de su casa, ya que ella sabía que yo estudiaba electricidad; al culminar, la misma quedó muy contenta y satisfecha por el trabajo que realicé y me pidió una tarjeta para recomendarme con otras personas”, expone el joven. El técnico cuenta que dio su número a la señora en un papel de manera informal y ahí fue que le nació la idea de iniciarse profesionalmente en este oficio.
Claudio emprendió este trabajo repartiendo tarjetas, que él mismo diseñó, a sus vecinos y amigos en la cual ofrecía servicios como instalación de tomas de corriente, portalámparas, duchas eléctricas y mantenimientos de acondicionadores de aire. “Mi negocio tiene por nombre Electrical CC, lo primero significa eléctrico en español y las dos letras representan las iniciales de mi nombre y apellido”, señala el chico.
“Mis actividades fueron creciendo y ahora ya no me contratan solo para colocar focos, sino que hasta para realizar instalación de conductores eléctricos en los hogares”, indica el emprendedor. Asimismo, el técnico cuenta que comenzó trabajando solo, pero que eventualmente contrata a otros electricistas para que hagan el trabajo, debido a que coincide en horario con su facultad. “Una vez que cobro por los trabajos que realizo, adquiero nuevas herramientas. Empecé solo con una pinza, un buscapolo y cinta aisladora, ahora ya cuento hasta con un medidor de gas para acondicionadores de aire”, destaca el joven.
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El electricista se siente agradecido con su familia y resalta la importancia del apoyo de los seres queridos a la hora de realizar un emprendimiento o culminar el estudio. “Ellos me motivan a esforzarme cada día más y a seguir formándome”, expresa el técnico.
Claudio invita a los chicos y chicas a luchar por sus sueños y no rendirse en el camino. “Si vos tenés una pasión y, por razones económicas, no podés seguir eso que a vos te gusta, no te desesperes pues, con esfuerzo y sacrificio, el día de mañana tendrás la oportunidad de perseguir eso que amás”, concluye el joven.
Por Alejandro Gauna (18 años)