Desde la comodidad de su casa, Jazmín vende manualidades hechas de materiales reciclados. La idea de crear este emprendimiento surgió después de que ella decidiera ser su propia jefa. La joven comenta que cuando una persona trabaja de manera independiente, es importante practicar la autodisciplina. “Me levanto a las seis de la mañana, realizo actividades físicas, cuido de mis mascotas y luego me ocupo de los pedidos”, añade.
“Mi lema principal siempre fue 'nada se tira, todo se recicla'. Los objetos parecen estar hechos de materiales nuevos”, manifiesta. Para Jazmín, las cosas no son inservibles, pues con ingenio, ella les da la apariencia de haber sido recién compradas de una tienda. Títeres, peluches y centros de mesas son algunos de los trabajos que realiza la emprendedora. Desde el 2012, posee su negocio online “La tienda de Pandora” en Facebook.
Mientras que los demás tiran la botella al basurero, Jazmín observa que ese material, considerado como residuo, puede ser un florero. “Con un poco de imaginación, las cosas que tenés al alcance dejan de ser viejas y se convierten en algo moderno y maravilloso”, destaca. La emprendedora también utiliza el papel y el cartón para sus manualidades.
Jazmín comenta que se siente muy satisfecha cuando recicla los materiales para crear algo nuevo, pues con esta actividad ayuda al medio ambiente.“Es simplemente bello, pero hay que tener un poco de cuidado, porque se vuelve adictivo recoger las ruedas o cajas de la calle y la gente te mira asombrada preguntándose qué estás haciendo”, relata.
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La joven manifiesta que nunca dice “no” como respuesta a sus clientes. “Trabajo con el dibujo, la pintura, hago moldes para los muñecos y tejo crochet. Además, si no sé algo, ensayo hasta aprender; al principio, no tenía idea de cómo colocar los hilos en la máquina de coser, pero lo logré jugando con mi pobre artefacto”, añade.
Por último, Jazmín aconseja a los jóvenes que confíen en sus planes a pesar de que los demás digan lo contrario. “La gente les hará creer que sus ideas son ridículas; por eso nunca escuchen críticas negativas de personas que no se animan a luchar por lo que quieren. También les dirán que del arte no se vive; sin embargo, deben creer en ustedes mismos, perseverar con sus proyectos y verán que cosecharán buenos frutos”, finaliza.
Por Dahiana Galeano (20 años)