Un nuevo desafío tocó las puertas del arte nacional en los primeros días de este año: el estreno de la versión paraguaya del filme “El príncipe encantador”, que fue interpretada vocalmente en castellano neutro por compatriotas. “Doblar una película es un reto diferente al que un actor se enfrenta, empezando por el acento paraguayo, que debe desaparecer, y pasando por el hecho de que toda la representación recae en la voz”, cuenta Verónica.
Detrás de los encantadores personajes que se hacen presentes en el filme animado, hay largas horas de preparación y un exhaustivo trabajo artístico, pues los actores no solo tienen que conseguir que sus voces encajen con el personaje que observan los espectadores, sino que deben sacar lágrimas o provocar carcajadas apelando únicamente a la entonación de sus palabras.
Verónica fue quien dio vida a la voz de la audaz y habilidosa mujer que acompaña al Príncipe Felipe Encantador en la aventura de encontrar el verdadero amor. “Me sentí muy cómoda caracterizando a Lenore porque es una mujer sumamente fuerte e independiente, que se siente capaz de ganarse el mundo por sus propios medios y eso es sumamente refrescante en una película de animación”, cuenta.
En nuestro país existe el doblaje del español al guaraní, como en el caso de “Dragon Ball” y “El Chavo del 8”, pero la producción de “El príncipe encantador” fue hecha para un público extranjero y, por ende, representa una gran oportunidad para dar a conocer el potencial de nuestro país, según afirma la joven. “La posibilidad de que se doble en Paraguay con acento neutro representa un paso enorme para poder seguir prestando voces locales para el mercado latinoamericano; sin dudas, es una gran oportunidad para exportar el talento paraguayo”, opina.
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La actriz cuenta que la llama del arte encendió su vida desde la niñez y, asimismo, afirma que encuentra un refugio en la expresión de sus emociones, ya sea a través de la música, la danza o la interpretación de personajes. “Me considero de naturaleza netamente artística y estoy orgullosa de cada trabajo que realizo; sin embargo, creo que encontré en mi voz un lugar muy especial que me gustaría seguir explorando”, comenta la artista.
Potencial, calidad y gran talento son las cualidades que la joven ve en la proliferación de películas nacionales de los últimos años. “Hay cientos de historias por contar y un gran número de personas, desde la parte técnica hasta la artística, que van a seguir trabajando para posicionar a nuestro cine en el mapa mundial”, declara la actriz.
La joven expresa sus deseos de seguir trabajando por lo que ama y afirma que se encuentra feliz con el resultado de cada uno de sus trabajos. “El arte es un agente de cambio y constituye una forma de hacer visibles todas las causas por las que luchamos como humanos y ciudadanos. Quiero ver este país florecer desde la cultura; entonces, creo que debemos seguir dando el granito de arena que nos corresponde como artistas”, finaliza Verónica.
Por Belén Cuevas (17 años)