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En la actualidad, es habitual escuchar música utilizando los auriculares. Sin embargo, el hábito de oír con volumen alto aumenta el riesgo de sufrir problemas auditivos, incluso se puede llegar a la sordera, ¿lo sabías?
Los auriculares se han vuelto parte de la vida diaria de los adolescentes; es normal que los jóvenes usen este aparato a fin de escuchar sus músicas favoritas, ya sea en el colectivo, colegio, limpiando la casa o haciendo algún deporte para distraerse. Pero, se debe saber que no es recomendable vivir con los cables puestos en el oído, pues los tímpanos también necesitan descanso.
La Organización Mundial de la Salud estima que más de 1.100 millones de jóvenes de todo el mundo podrían estar en riesgo de sufrir la pérdida de audición debido al volumen excesivo con el que escuchan las músicas a través de los auriculares. La institución recomienda que el nivel más alto permisible de exposición al ruido sea de 85 decibelios durante un máximo de 8 horas al día; si sobrepasás el límite, hasta podrías estar en riesgo de padecer sordera.
Si deseás escuchar música, hacelo, pero con un volumen adecuado a tus oídos y un tiempo limitado que no sobrepase una hora. De esta manera, evitarás accidentes cuando camines por la calle, podrás oír la bocina de algún colectivo alertándote de un peligro y, si un amigo te saluda, lograrás prestarle atención.
Muchos aman la música y se sienten transportados a un mundo mágico cuando escuchan la voz de su artista favorito retumbando en los oídos. Sin embargo, esta práctica puede ser dañina; por eso, tené cuidado y no pongas en peligro a uno de los sentidos que te ayudan a comunicarte con el medio que te rodea.
Por Mónica Rodríguez (18 años)