Después del colegio y el cursillo, el primer año en la facultad puede ser un golpe para los que acostumbran a las terceras oportunidades en la escolar básica, pues estando en la universidad, las responsabilidades aumentan considerablemente. “Pasan las semanas, se me encima todo; ¡ayuda!” es el pedido de auxilio que seguramente muchos ya emitieron; sin embargo, existen algunas prácticas que podés poner en marcha para no recusar y así culminar un buen año lectivo.
Para los jóvenes que no optaron por un año sabático y decidieron saltar del cole a la universidad, es de suma importancia dominar los hábitos para hacer algunos ajustes de aquellas malas costumbres y sobrellevar una rutina formidable. Las horas de sueño son fundamentales para mantener una concentración máxima a la hora de escuchar las horas cátedras de los profes, pues sin concentración el aplazo te dice “mi nueva víctima”.
Aunque muchos digan “yo solo voy a la facu para estudiar y no para hacer amigos", entablar conversaciones para crear lazos de amistad con los algunos compañeros constituye una de las herramientas y motivos para ir a la facu con más ganas que ayer. Además, esto puede ser el paso inicial para no estar solo en la parada del bus, hacer grupos de estudio o pasar de buena manera el ocio cuando los profes se ausentan.
Trabajar, estudiar y mantener un cierto promedio también forma parte de la lucha constante de una carrera universitaria y, para colmo, una barrera de estudio que pareciera ser escudo del fracaso es el estrés acompañado de ansiedad. ¡Relax!, existen métodos y técnicas de relajación en cuentas de YouTube como “Desansiedad" y “Hola Yoga", las cuales pueden ser de ayuda para reducir el estrés causante de los exámenes reprobados.
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Aunque la creatividad no sea lo tuyo, los apuntes poseen ciertas influencias al momento de aprender antes de una exposición, una prueba parcial y un examen final; entonces, una pincelada vibrante con un recuadro pulcro pueden ser efectivas para la retención de informaciones. ¡Claro!, al realizar una llamativa agenda de apuntes, será necesario agarrar un lápiz en clases y no el celular para revisar el WhatsApp.
Que ni se te ocurra inventar una excusa, pues aunque lleves como prueba las radiografías de tu perro que comió la tarea, no habrá una tercera oportunidad en las parciales o entrega de trabajos. Estudiantes de primer año, a preparar los bolígrafos y libros, porque años de carrera forman fila para batallar.
Por Ezequiel Alegre (18 años)