"Pasear perros no es un trabajo, cuando amás de verdad a los animales"

"Si uno ama lo que hace, ve el laburo como un pasatiempo o hobbie", cuenta Sonia Benítez (25), quien, junto con su esposo Alejandro Mareco, inició el emprendimiento de pasear perros, ejercitarlos y mimarlos cuando los dueños no tienen suficiente tiempo.

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“Desde que era pequeño, sentí un cariño particular hacia los perros, en especial, porque tenía un cachorrito llamado Mariscal, al que amaba mucho. Después, llegué a salir por las calles con Locky, el cachorro de un miembro de la empresa donde trabajaba, y algo dentro de mí sabía que detrás de un simple paseo podría haber un futuro”, cuenta Alejandro.

Por su parte, Sonia expresa que, "cuando recién había pasado una semana de que nos casamos, Ale dejó su trabajo y, prácticamente, fue nuestro primer desafío y obstáculo a superar. Entonces, en agosto, decidimos apoyarnos uno al otro, crear páginas en las redes sociales, para buscar clientes y pasear perros, de manera que podamos iniciar en el mundo de paseadores de perros, aunque en Paraguay no se escuche mucho sobre este laburo".

La pareja manifiesta que, sorprendentemente, la respuesta de la gente es súper positiva y ahora cuentan con unos 30 clientes, algunos con más de un perro que pasear. Por otra parte, los jóvenes expresan que sus familiares y las personas que están en sus entornos son quienes les alientan a no bajar la cabeza y a aspirar a mucho más.

"Que los perros se paseen es muy importante, ya que, a veces, los dueños no tienen tiempo para sus mascotas y los encierran en un solo espacio, hecho que genera que el animal esté ansioso, quiera morder cualquier cosa y no se quede quieto ni por un rato. Además, ejercitar a los cachorritos, mimarlos, jugar con ellos, enseñarles a socializar y hacerles gastar el exceso de energía son cuestiones fundamentales", dice Alejandro.

También, los paseos que lleva a cabo Ale son para todo tipo de perro, sin importar la raza, y suelen durar de 45 minutos a 1 hora, dependiendo del dueño del cachorro. Por otra parte, Sonia es la community manager del equipo, pues ella no sale a pasear a los perros, pero se encarga de organizar todo, de manejar las redes sociales, captar nuevos clientes, etc.

Para el futuro, la pareja de emprendedores desea poner un local en su casa y agregar más servicios como ducha para perros y venta de correas u otros accesorios. "Deseamos crecer; no queremos limitarnos ni conformarnos", expresa Sonia.

Asimismo, Ale comenta que "en este trabajo, nunca trato de ganarme a los dueños, sino que mi amor hacia los perros es muy sincero, casi inexplicable, pues la rápida confianza que los peludos me demuestran, quizás, es como si existiera un don y una conexión especial". Además, los chicos muestran un poco más sobre estos divertidos paseos en sus página de Facebook e Instagram "paseador_de_perros_ale".

Finalmente, Sonia y Alejandro resaltan que "todo emprendimiento surge a partir de la fe que uno tiene en Dios y el empeño que se pone en lo que se quiere".

Por Andrea Parra (18 años)

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