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Encimar un adaptador trifásico a una zapatilla para lograr conectar tu tevé, play station o cargar el celular, además de la notebook, puede llegar a ocasionar unas chispitas, un olor a quemado o hasta un incendio en la casa. El uso excesivo de electricidad en una sola tomacorrientes es extremadamente peligroso.
Hace pocos días, un domicilio ubicado sobre las calles Constitución y 25 de Mayo fue consumido completamente por el fuego a causa de una falla eléctrica dentro de la casa. Afortunadamente, no hubo ningún herido, ya que la familia no se encontraba en el hogar. El hecho se produjo por una conexión eléctrica antigua y clandestina.
“Con la electricidad no se juega” es una de las reglas principales de la vida que nos enseñaron nuestros padres. Usar los aparatos electrónicos hasta recalentarse y descuidar los enchufes de la casa acarrean graves consecuencias que pueden ser irremediables.
Los medidores de la ANDE no son un simple adorno para quitarte dinero; estos regulan la cantidad de energía que entra a la casa y miden el consumo diario de electricidad. El uso clandestino de electricidad está presente en todas las zonas, aunque es ilegal, y los incendios en las casas se producen fácilmente cuando no tienen ningún control. A veces, lo gratis o barato sale caro. No pierdas tus pertenencias por no querer pagar tu consumo de luz.
Con el fuerte calor que se viene en el verano, la demanda de consumo en energía eléctrica aumentará. De la misma manera, no viene para nada mal darle una miradita a las conexiones que hay en la casa, además de repararlas si es necesario. Podés evitar que los eletrodomésticos se quemen o que vos sufras algún daño físico.
Recordá que debés intentar usar lo más mínimo de electricidad posible; desenchufá y apagá los aparatos electrónicos que no estés utilizando en el momento. Estas simples reglas ya las conocemos, pero, por pereza, no hacemos caso a lo que nos conviene. Así que, no esperes a que tus pertenencias se conviertan en cenizas para revisar las instalaciones eléctricas de tu hogar.
Por José Peralta (18 años)