Por las calles de Asunción circulan dos tipos de buses: los diferenciales con aire acondicionado y los convencionales, más conocidos como “buses chatarra”. Semanas atrás, HC anunciaba, mediante un video que fue transmitido por todos los canales de aire, que el precio del pasaje de las chatarras pasaba de costar G. 2.000 en vez del G. 2.100 anterior.
Normalmente, el paraguayo paga cuatro pasajes al día, por lo que la reducción representa un ahorro de G. 400 por jornada. ¡Qué muchas cosas podemos hacer con G. 400'i más en el bolsillo! Lo primero que se viene a la cabeza es juntar esas moneditas en una semana laboral para tener G. 2.400, casi lo suficiente para comprar una empanada, pero sin pancito.
Así también, existen personas que piensan en grande y planean ahorrar las moneditas durante todo un mes y así juntar G. 9.600. Con ese dinero uno puede adquirir un kit de prevención contra los apagones de la ANDE, consistente en un paquete de velas por G. 2.600, una cajita de fósforos a G. 500, una pantalla que cuesta G. 4.500 y, por el vuelto, espirales para ahuyentar a los mosquitos.
Gracias al presidente Cartes y al nuevo precio del pasaje, muchas familias ya planean sus vacaciones. Si alguien quiere ir a Miami, debe ahorrar los G. 100'i del pasaje durante 27 años para conseguir un boleto ida y vuelta. Definitivamente, es una buena manera de aprovechar esta bendición que nos ha regalado el nuevo rumbo de HC.
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El precio del pasaje disminuyó y la gente igual se pasa quejando. Las personas no ven que el Presidente quiere que aprendamos a ahorrar para tener una mejor calidad de vida y, como dice una conocida frase, “por algo se empieza”. Mientras tanto, podés comprar nomás ya tu empanada, pero sin pancito, tu kit anti ANDE o ir ahorrando para unas vacaciones en Miami. La paciencia es una gran virtud; practiquémosla.
Por Brian Cáceres Verón (17 años)