El video fue filmado por un ciudadano brasileño durante un viaje que realizó a Arabia Saudita el Gobernador de Amambay Pedro González, junto con Elvio Insfrán, Francisco Carneiro, Ignacio Cantero y Roberto Abate, quienes ocupan el cargo de concejales de la capital del décimotercer departamento. Mientras el extranjero grababa, los ediles comentaban que podían “comer un poco de royalties y de Fonacide”.
Aparentemente, el ciudadano brasileño no hablaba guaraní, puesto que la conversación se realizó en nuestro nativo idioma. Posteriormente, la grabación fue subida a Facebook en donde la ciudadanía expresó su indignación hacia los concejales.
Este caso sirve para demostrar, una vez más, que el dinero destinado a la educación sirve principalmente para que las autoridades puedan “comer” y enriquecerse cada vez más. No es algo nuevo decir que la plata del Fonacide y de los royalties provenientes de las dos represas binacionales, nunca va a parar a su verdadero destino y con frecuencia termina con paradero desconocido; eso pasa en, practicamente, todos los municipios y las gobernaciones.
Comer un poco de royalties y Fonacide significa burlarse del pueblo, reirse en la cara de los votantes que los eligieron como concejales y negar una educación digna a cientos de miles de niños y jóvenes. Con un sistema educativo paupérrimo, es indignante saber que nuestras propias autoridades se ocupen de enriquecerse más a costa de estudiantes que deben dar clases bajo un mango y sentados sobre ladrillos.
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Lastimosamente, el Paraguay es un nido de corruptos que solo piensan en seguir robando la plata del pueblo y hacer sufrir a la gente. Royalties y Fonacide deberían usarse para solucionar los problemas educativos, mejorar los locales y proveer el almuerzo escolar, no como banco de unos ineptos que están en el poder quién sabe cómo. En el país de las maravillas sigue reinando el desinterés, el abandono y los líderes continúan comiendo y engordando con fondos que deberían haber ido a la educación de nuestros niños y jóvenes.
Por Brian Cáceres Verón (17 años)