Los videojuegos son aplicaciones interactivas que, por medio de consolas, televisores y celulares, simulan experiencias en las que los participantes controlan las acciones de unos personajes. Dentro de estas aventuras, los usuarios deben cumplir con misiones, siguiendo determinadas reglas, para lograr un objetivo específico.
Desde rescatar a una princesa de las garras del mítico dragón hasta disparar metralletas en una guerra, los videojuegos de hecho son muy diferentes entre sí. Sin embargo, estudios realizados por la Asociación Americana de Psicología afirman que el 98% de estas aplicaciones interactivas poseen contenidos violentos.
Las escenas de desnudez, sexo y asesinatos son frecuentes dentro de este tipo de entretenimiento. En estos días, el polémico videojuego “Rape Day” fue retirado de Internet debido a su contenido violento, pues en esta aplicación interactiva los participantes deben cometer agresiones sexuales, incluida la necrofilia y el incesto, para pasar de nivel.
Existe un sistema de clasificación de videojuegos que busca restringir el acceso de los niños y adolescentes a estas aplicaciones con contenidos para adultos. Sin embargo, según un estudio del Comité de Comercio, Ciencia y Transporte del Senado estadounidense, el 90% de los adolescentes declara que sus padres nunca verifican las categorías de los juegos de video que compran o alquilan.
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Hace poco tiempo, el mundo fue testigo de una masacre en una escuela de la ciudad de Suzano, Brasil, pues varios videos de este atentado recorrieron las redes sociales. Dos exalumnos de una institución educativa ingresaron a la casa de estudios y dispararon contra funcionarios y alumnos, acabando con la vida de diez de ellos.

Las similitudes entre el videojuego Fortnite y lo ocurrido en esta escuela del Brasil, debido a la vestimenta y las armas utilizadas por los dos jóvenes, llevaron a muchos internautas a relacionar esta aplicación interactiva con los asesinatos.
A pesar de las diversas conjeturas, más allá de las coincidencias, no hay nada que compruebe el vínculo entre el atentado y la modalidad de este juego electrónico. Sin embargo, en las redes sociales, esta masacre inició un debate acerca de las consecuencias del abuso de este tipo de entretenimiento.
Así como Brasil, el año pasado, Estados Unidos fue sacudido por la violencia de las armas de fuego, pues en el estado de Texas, un adolescente de 17 años mató a diez personas e hirió a otras diez con un revólver y una escopeta, en una escuela de la ciudad de Santa Fe.
Algunos estudios, como la investigación realizada por la Escuela de Psicología de la Universidad de Sussex, Inglaterra, afirman que la larga exposición a estas aplicaciones genera comportamientos violentos en los jugadores. Sin embargo, no existen estudios concluyentes acerca de la efectiva relación entre los videojuegos sangrientos y las conductas agresivas de los adolescentes.
A nivel local, el psicoanalista Mario Torres indica que, en muchas ocasiones, las consolas de videojuegos funcionan como “niñeras mecánicas” para los niños y adolescentes, pues los chicos, en lugar de pasar tiempo con sus padres o jugar con los amigos, se entretienen con estos aparatos tecnológicos.

“Fácilmente, los adolescentes pueden volverse muy dependientes de estas tecnologías porque en la pubertad se inicia, de una manera más enfática, el desarrollo del pensamiento lógico”, advierte el especialista. Por este motivo, el psicoanalista resalta la importancia de que los padres conversen con sus hijos acerca de los problemas que derivan del abuso de estos videojuegos.
“Hay mucha fragilidad en los adolescentes debido a todos los cambios que ocurren dentro de ellos mismos y, por esto, los chicos pasan por una crisis. Todas estas propuestas tecnológicas, que vienen de afuera, son bienvenidas pero con control, pues estos límites son para beneficio de los púberes”, añade el psicólogo.
El profesional afirma que la fragilidad en la estructura de la personalidad de los adolescentes, debido a que esta se encuentra en desarrollo, la soledad de algunos chicos y la exposición a videojuegos violentos pueden facilitar la aparición de trastornos depresivos.
Mario indica que es urgente cuestionarnos acerca de los contenidos violentos en los videojuegos, pues el crimen se naturaliza debido a estas imágenes agresivas y, mediante las mismas, se expone el hecho de matar como un entretenimiento. “Esto no significa que todos los que elijan este tipo de diversión serán asesinos pero, definitivamente, debemos replantearnos el uso de estas apps”, finalizó.
Un estudio publicado por la revista de la Academia Estadounidense de Pediatría concluyó que los videojuegos violentos aumentan el índice de agresiones en las escuelas, pues este tipo de entretenimiento favorece el desarrollo de conductas agresivas en los “gamers”.
El fácil acceso de los jóvenes a consolas, además de la falta de control por parte de los padres, genera adolescentes adictos a este tipo de entretenimiento. El año pasado, la OMS declaró que el uso abusivo de videojuegos es un desorden del comportamiento.
Ante la presencia de videojuegos violentos entre los alumnos de las escuelas, la directora general de Promoción y Protección de los Derechos de la Niñez del Ministerio de Educación (MEC), Sonia Escauriza, argumenta que la exposición de los estudiantes a este tipo de entretenimiento es responsabilidad de los padres de familia.

“Estos videojuegos tienen sus riesgos y la elección de este tipo de entretenimiento, por parte de los alumnos, es responsabilidad de los padres”, explicó Sonia. Por otra parte, la directora general comenta que el uso de aparatos tecnológicos, dentro de las instituciones educativas, está regulado por la propuesta pedagógica de los docentes.
Como herramienta de prevención ante la adicción a los videojuegos, Sonia señala que el MEC busca fortalecer el rol de las familias en el acompañamiento de los alumnos. “El ministerio ofrece materiales educativos que destacan la importancia de que los padres dediquen tiempo a sus hijos y el objetivo de estos programas es prevenir cualquier situación que pueda generar daño a los estudiantes”, concluyó la funcionaria.
Las peligrosas armas de fuego, en ocasiones, se encuentran al alcance de los niños y adolescentes, pues algunos padres irresponsables guardan estas pistolas en rincones poco seguros de su hogar. A veces, para que ocurra un accidente con un letal desenlace, basta con que el chico suba sobre una silla con el fin de alcanzar la repisa, estire los brazos y agarre el arma de fuego de papá con la intención de jugar.

Asimismo, algunos padres imprudentes deciden demostrar su alegría con tiros al aire en la medianoche del 31 de diciembre, cuando gana el equipo de fútbol de su preferencia o luego del brindis de Navidad. Los hijos de estos insensatos crecen con el ejemplo de sus papás y, a causa de esto, podrían tratar de imitar los peligrosos festejos.
Cada año, existen casos de niños y adolescentes que hieren a alguien o, accidentalmente, se disparan a sí mismos con armas de fuego que encuentra en su propia casa. Algunos chicos desarrollan una gran curiosidad por las pistolas y revólveres a causa de la televisión, los videojuegos y el mal ejemplo de sus padres.
A la luz de estos datos y la opinión de los entrevistados, podemos concluir que los videojuegos, si son mal utilizados, pueden afectar a la salud mental de los adolescentes. Por lo tanto, es importante el papel de los padres en las actividades de los chicos, pues estos deben acompañar activamente a sus hijos, alentarlos a que socialicen y motivarlos a que compartan con amigos, en lugar de encerrarse a jugar con estas consolas.
Por Agustina Vallena (19 años)
