La final de vuelta la Copa Libertadores sigue con muchas dudas. Si bien este martes se decidió que será el 8 o 9 de diciembre fuera de Argentina, esto quedó sujeto al fallo del Tribunal Disciplinario de la Confederación Sudamericana de Fútbol.
Las fechas probables y la imposibilidad de llevarse a cabo en Argentina son lo único seguro; no se sabe la hora del choque, si contará con público, si será solo con hinchas locales, entre otras cosas.
Con respecto a la sede, esta mañana comenzó a ganar fuerza la chance de que el Defensores del Chaco o el General Pablo Rojas puedan albergar el superclásico del fútbol argentino.
Pese a que no es algo oficial, vale recordar que seis miembros de la barra organizada xeneize fueron expulsados de Paraguay a mediados de 2016 por ocasionar disturbios antes de un encuentro con Cerro Porteño.
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Elvio Javier Luis Sosa, Federico Luis Finochieto, Rafael Di Zeo, Sebastián Marcelo Saravia, Mauro Leandro Martin y Ramón Jesús Vedoya fueron condenados y expulsados por el juez de garantías José Delmás.
El magistrado condenó a dos años de cárcel a los seis citados anteriormente y decretó la expulsión de los mismos tras declararlos culpables de los delitos de perturbación de la paz pública y amenaza de hecho punible que fueron consumados por sus dirigidos, alrededor de 200 hinchas, el 28 de abril en la capital paraguaya. Estos tienen prohibido regresar a Paraguay y si lo hacen serán enviados a la cárcel de Tacumbú.