“Estoy demasiado feliz, estoy un poco en shock, nunca gané a una jugadora tan buena y encima en un Grand Slam, es imposible estar más contenta”, dijo la paraguaya de 25 años y 97 del mundo.
La tenista no pudo reprimir las lágrimas tras el triunfo y luego se dejó caer sobre la tierra batida de la pista 6 donde tuvo lugar el partido.
“Incluso ahora si pienso en ello me dan ganas de llorar de alegría. Creo que esta noche voy a dormir llorando”, aseguró ya unos minutos más tarde de haber logrado el triunfo.
Cepede alcanzó así por vez primera la tercera ronda de un Grand Slam y sigue los pasos de su compatriota Rossana de los Ríos, que en 2000 alcanzó los octavos de final.
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Para igualar esa gesta, la paraguaya se medirá ahora a la colombiana Mariana Duque-Mariño, que se impuso a la eslovaca Magdalena Rybarikova por 1-6, 6-3 y 8-6.
“Creo que es algo buenísimo para Sudamérica que juguemos aquí dos tenistas de allí. Somos pocas y al menos habrá una en octavos, así que es demasiado. Gane quien gane estaré feliz, pero me voy a romper en la cancha para ser yo”, señaló.
Cepede aseguró que conoce bien a su próxima rival de quien dijo ser amiga, pero señaló que “cuando entremos en la cancha va a ser guerra”.