“Estoy mucho mejor preparado para Wimbledon este año que el pasado”, dijo Federer. “En el 2016 trabajé duramente en la temporada de tierra. Y la de hierba fue difícil, por los problemas en la espalda y rodilla. Me faltó preparación”, añadió el suizo, que con 35 años y 342 días es ahora el jugador más veterano en alcanzar las semifinales del All England Club en 40 años.
“Este año soy un jugador de tenis normal de nuevo, y me puedo concentrar más en las tácticas. Creo que esa es la diferencia. Estoy jugando muy bien, estoy descansado y fresco y me siento con confianza también. A partir de ahí todo lo bueno puede suceder”, añadió. Federer deseó suerte a Andy Murray y en especial a Novak Djokovic, que se retiró ante el checo Tomas Berdych por una lesión en el codo y que podría parar durante un largo periodo para solucionar este problema.
“Como rival y como amigo, solo puedo desear que se recuperen bien”, dijo, y sobre Novak recordó que “está en una situación similar a la mía el año pasado”, añadió, “él jugó un montón de tenis en los últimos años, y lesionarse en un momento dado es casi normal , y quiero que se recupere rápidamente”.
