El viernes 1,2 en The Growler Bar, desde las 21:00, actuarán Decio Caetano (Brasil) y Big Charlie (Paraguay).
El sábado 13 la música llegará a la Estación del Arte, con Martín Sued y Sergio Verdinelli (Argentina) y Juanjo Corbalán (Paraguay), a las 21:00.
Entre tanto, el domingo 13, a la misma hora, en Liverpool Pub, subirán a escena Sergio Coelho y Fumê Jazz Trio (Brasil) y el Cuarteto de Folclore Fusión de la OSN.
Las entradas anticipadas se venden a G. 35.000 (por día) a través del sitio web Passline. En puerta costarán G. 45.000.
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El evento es organizado por Drácena Producciones Artísticas.
Diseminando jazz
Volver a realizar el festival “simboliza varios años de trabajo y mucho esfuerzo por generar un público y abrir un espacio de difusión”, manifestó el baterista Seba Ramírez, uno de los organizadores.
Para el músico, la importancia de poder sostener un evento como este radica “en poder mover un proyecto musical de jazz o música instrumental más allá de la capital, ya que incluso en Asunción hay pocos lugares”, dijo.
Asimismo, afirmó que cree que “hay gente en el interior del país con ganas de escuchar, ver y consumir arte, pero escasos espacios donde se pueda acceder a otro tipo de música que no sea lo que suena en las radios”.
Acerca de la escena musical en Ciudad del Este, expresó que “creció bastante en poco tiempo” y, además, “los músicos se están abriendo lentamente a otros estilos”, por lo cual para él es fundamental “seguir insistiendo en crear una movida cultural alternativa”.
Acerca del público esteño, contó que recibió bien las dos ediciones anteriores del festival. Asimismo, destacó que luego del último evento se propusieron mantener un ciclo de jazz mensual. Eso “logró fortalecer aun más el nombre del festival y la aceptación del público”. En este sentido, llevan proyectos de jazz con músicos internacionales “de primer nivel” y “fue realmente muy bien recibido”.
En todo este proceso, desde la primera edición, tuvieron “facilidades y dificultades”. Hacer esta tercera entrega “fue más fácil, porque al tener un ciclo logramos entablar mejor relación y alcance al público en general”. No obstante, agregó: “Siempre es un riesgo organizar este tipo de eventos en una ciudad donde hay poca movida cultural, en general”; por algo él piensa en esto como “una apuesta o una inversión a largo plazo”.
Ramírez sostuvo que vale la pena seguir apostando e insistiendo para que “las cosas sucedan” y se encuentran trabajando con una “perspectiva bastante positiva”.